Si alguna vez has sospechado que un amigo te canceló una salida para quedarse viendo cierta serie, podrías tener razón. Sobre todo si estamos hablando de un millenial. Pese a que ya se ha comentado hasta el cansancio que “las series son los nuevos libros”, ahora al parecer también muchos reemplazan la interacción social en las calles por las emociones ofrecidas por las ficciones de plataformas como Netflix.
Aunque todos los humanos podemos caer en la tentación de pegarnos a una pantalla un sábado entero; según un estudio realizado por Morning Consult a estadounidenses entre los 18 y 29 años, sus hábitos son poco sanos. O por lo menos, mucho menos saludables que los de personas mayores.
Los adultos jóvenes confesaron, por ejemplo, que son muy propensos a pasar una noche entera despiertos para ver una ficción. La cifra de millenials que reconocieron tener esa práctica es de un 76%, mientras que solo un 52% de los encuestados de otras edades acostumbran hacer lo mismo. Es tanta la adicción en algunos casos que el 45% de los jóvenes pueden cancelar una salida. Por supuesto, lo que prefieren hacer es mirar esa serie que los tienen enganchados.
No obstante, vale la pena pensar esas decisiones teniendo en cuenta el panorama completo. Es decir, también evaluar las condiciones económicas de las nuevas generaciones. En ese sentido, es innegable que sus ingresos suelen ser dramáticamente inferiores a los de sus padres a su edad. Así que, ante un bajo presupuesto para gastar en su tiempo libre, Netflix resulta un gran aliado al ofrecer un cómodo catálogo mensual al mismo precio que un par de cervezas.
De cualquier manera, el impacto de tales decisiones sedentarias seguro que pasa factura a nivel de salud (tanto física como mental). Por ese motivo, los números arrojados por encuestas como esta resultan preocupantes. Te invitamos a revisarlos en detalle en el gráfico que incluimos acá debajo.