Es conocida por todos la habilidad que tiene el personaje de Deadpool en las películas para hacer chistes que logren enojar a sus destinatario. También es sabido que a los escritores de estos films no les tiembla el pulso a la hora de realizar guiones con bromas que no dejen a nadie a salvo.
Pero algo que no todos los fans del antihéroe interpretado por Ryan Reynolds tenían presente es que esta característica del personaje podría estar en sus genes como herencia de uno de sus creadores, Rob Liefeld, quien también parece portar una especie de don innato para molestar a otros, incluso sin quererlo.
El fin de semana pasado, durante un foro realizado en la más reciente edición del Amazing Las Vegas Comic Con, Liefeld le confesó al mundo cómo es que una vez hizo enojar a Russell Crowe al tratar de invitarlo a formar parte de Deadpool 2.
Conversando sobre la realización de la película y los usuales rumores sobre el casting, Liefeld contó que sus verdaderas intenciones eran tantear al actor australiano el papel de Cable (el cual terminó siendo interpretado por Josh Brolin), pero que su propuesta, sorpresivamente para él en ese momento, ofendió a Crowe.
“Una noche, antes de irme a dormir, sin saber que Russell Crowe estaba en Twitter, tontamente le escribí un tweet sin pensar que me respondería. Estaba acostado y le puse: ‘Hey, Russell, ¡deberías leer el papel de Cable'”.
“Eso no salió muy bien. Me gritaron mucho y me desperté con un mensaje, porque él está en Australia, de Russell Crowe diciendo: ‘¡¿Hacer una audición para el papel?!’. Mi representante me puso al tanto: ‘Sí, Russell Crowe no hace audiciones, Rob. En cierto modo, lo insultaste’. Yo estaba como ‘¡Lo siento! Todavía no han elegido a Cable, así que sólo estoy tirando ideas’. Después, mi teléfono sonó y puede que algunas personas de FOX me gritaran durante una hora, así que dejé Twitter por un tiempo”, terminó admitiendo el guionista entre risas.
Podés ver el divertido relato de Rob Liefeld a continuación, a partir del minuto 13:39.