Los problemas de salud de Morrissey no son novedad: el astro británico canceló dos tours en los últimos años (uno que incluía una presentación en Tecnópolis) por diferentes causas. Síndrome de Barrett, úlcera en el estómago y una doble neumonía fueron las causas que se reportaron en su momento, pero en diálogo con el periódico español El Mundo el cantante reveló que en los últimos años se enfrentó con cuatro posibles tipos de cáncer.
Fiel a su estilo, el músico declaró:
“Los médicos han descartado cáncer en mis tejidos ya cuatro veces, pero bueno. Si me muero, me muero. Y si no, no. Ahora mismo me siento bien. Soy consciente de que en mis fotos más recientes luzco un poco descuidado pero eso es lo que la enfermedad puede lograr. No me voy a preocupar por eso, descansaré cuando esté muerto.”
Este año, Morrissey editó su décimo disco solista World Peace Is None of Your Business (2014, Harvest / Capitol) y se encuentra trabajando en una novela que espera publicar el año próximo. A pesar de que los médicos le han recomendado dejar de tocar en vivo, Moz admite que es muy difícil para él porque lo tiene muy incorporado. Para variar, anoche mismo comenzó en Lisboa un tour europeo, con un show en el que su banda vistieron remeras que decían “Fuck Harvest”, en alusión a su reciente pelea con su sello que terminó en su despido.