El lunes por la noche, Morrissey dio un concierto en Tucson, Arizona, y mientras estaba en el sexto tema del set, “Everyday Is Like Sunday“, abandonó el escenario por perder la voz y no poder continuar con el show, que terminó en ese momento.
Luego, uno de los músicos tomó el micrófono y dijo:
“Su voz está destrozada. Lo escucharon, lo escucharon. Ha estado intentándolo realmente duro. Su voz está destrozada. Pedimos disculpas. Él pide disculpas. Saben que lo intentó”.
En otro video publicado por el sitio Madchester muestra a Morrissey esa misma noche pero más temprano, diciendo:
“Dejé parte de mi boca en Guadalajara. Pero voy a estar ahí, cantaré, y si es necesario caeré muerto”.
Hoy, el músico inglés tiene agendado un show en el Tobin Center de San Antonio, Texas, desde donde confirman que el concierto sigue en pie.