Sin lugar a dudas, esta no ha sido una buena semana para Quentin Tarantino.
El sábado, el nacido en la ciudad de Knoxville fue empujado al ojo de la tormenta por Uma Thurman, la actriz con la que trabajó en Pulp Fiction y las dos películas de Kill Bill, y quien, en una entrevista con The New York Times, dijo haber sido obligada por el director a realizar una riesgosa escena que culminó en un choque y un viaje directo al hospital para Thurman. Todo, según Uma, porque Tarantino “no quería escuchar un ‘no’, como cualquier director”.
Poco después de publicada dicha entrevista, el ganador de dos Oscars habló con el medio Deadline y reconoció su culpa en el incidente: “Soy culpable por ponerla en ese auto, pero no por la forma en que la gente dice que soy culpable de ello. Es el arrepentimiento más grande de mi vida, hacer que ella haga ese truco”, dijo.
Como si esto fuera poco, días más tarde empezó a circular por internet el audio de una entrevista que Tarantino le concedió al show radial del famoso conductor Howard Stern. En ese diálogo, el director se manifestó en favor de su colega Roman Polanski, quien en 1977 fue arrestado y acusado de drogar y violar a una niña de 13 años llamada Samantha Geimer.
Cuando Stern le preguntó por qué tomaba esa posición, Quentin argumentó que Geimer “salía con el tipo” y “quería parrandear con Roman”. Luego, agregó:
“No violó a una niña de trece años. Tuvo sexo con una menor. Eso no es violación. Para mí, cuando usás la palabra ‘violación’, estás hablando de violencia, empujones; es como uno de los crímenes más violentos del mundo. No podés usar la palabra ‘violación’ a la ligera. Es como lanzar la palabra ‘racista’. No se aplica a todo para lo que las personas la usan”.
A las horas, Geimer contestó a través de New York Daily News. “Está equivocado, les apuesto que lo sabe. Espero que no se siga avergonzando a él mismo hablando de esa manera” dijo la mujer de 54 años. “No estoy molesta, pero probablemente me sentiría mejor si se da cuenta ahora de que estaba equivocado, después de 15 años, después de escuchar los hechos”, continuó.
Ahora, a pesar de que Geimer dijo no estar enojada con él, Tarantino mostró un poco de altura y emitió un comunicado en el medio IndieWire para disculparse públicamente por sus desafortunadas palabras de hace una década y media.
El escrito reza así: “Quiero pedirle disculpas públicamente a Samantha Geimer por mis comentarios arrogantes en The Howard Stern Show, especulando sobre ella y el crimen que se cometió en su contra. Quince años después, me doy cuenta de lo equivocado que estaba. La Sra. Geimer FUE violada por Roman Polanski. Cuando Howard mencionó a Polanski, jugué incorrectamente al abogado del diablo en el debate por el simple hecho de ser provocativo. No tomé en consideración los sentimientos de la Sra. Geimer y por eso estoy totalmente arrepentido.
Entonces, Sra. Geimer, fui ignorante, insensible y, sobre todo, incorrecto.
Lo siento, Samantha.
Quentin Tarantino”.