Muchas de las canciones de los Beatles guardan una gran anécdota, ya sea de su proceso de escritura y/o de su grabación. Un claro ejemplo de esto es “Helter Skelter”, el track que formó parte del disco The White Album. El tema nació como una respuesta de Paul McCartney a las declaraciones de Pete Townshend, el guitarrista de The Who, quien en una entrevista con Melody Maker se atribuía haber escrito “el disco de rock and roll más ruidoso” de todos los tiempos.
“Estaba en Escocia y leí en Melody Maker que Pete Townshend había dicho: ‘Acabamos de hacer el disco de rock ‘n’ roll más lascivo, ruidoso y ridículo que hayas oído’”, dijo Macca en Anthology. “En realidad, nunca supe qué track era el que había hecho The Who, pero eso me llevó a ponerme a trabajar, solo el simple hecho de escucharlo hablar de eso. Así que les dije a los chicos: ‘Creo que deberíamos hacer una canción como esa, algo realmente salvaje’”.
Una grabación desgastante
Así fue cómo nació “Helter Skelter”, tema que a menudo es denominado como el primero de heavy metal, pero cuyo resultado final se logró tras un exhaustivo, desgastante y complejo proceso de grabación.
“Puedes escuchar las voces quebrarse. La tocamos tanto tiempo y con tanta frecuencia que al final puedes oír a Ringo decir: ‘Tengo ampollas en los dedos’. Solo tratamos de hacerlo más fuerte: ‘¿No podemos hacer que la batería suene más fuerte?’ Eso era realmente todo lo que quería: hacer una pista de rock ‘n’ roll muy fuerte y obscena con The Beatles. Y creo que es bastante bueno”, dijo Paul.
Tras 20 intentos que no contentaron al grupo, la toma número 21 fue la que quedó y hoy se puede disfrutar en el álbum. Sin lugar a dudas, se trata de una de las obras más destacadas de los Fab Four de Liverpool, pero que para llegar a ser lo que es hoy, requirió todo de sus intérpretes. “‘Helter Skelter’ fue una canción que hicimos con total locura e histeria en el estudio”, recordó Ringo Starr.