Pink Floyd partió la historia de la música en dos gracias a sus técnicas, su experimentación y sus sonidos tan variados y psicodélicos. Por supuesto, una de sus grandes obras fue The Dark Side of the Moon, su octavo disco de estudio que contiene himnos como “Money”, “Breathe (In the Air)“, “Time” y “The Great Gig in the Sky”.
“The Great Gig in the Sky” es de los pocos temas que contiene aportes vocales de una persona externa al grupo. Además, no cuenta con ninguno de sus miembros en el micrófono. Según Far Out Magazine, nació como una pista de órgano instrumental creada por Richard Wright a la que se sumó la voz de Clare Torry, quien improvisó su parte sin palabras.
Torry grabó tres tomas improvisadas de “The Great Gig in the Sky”, por las que recibió tan solo 30 libras esterlinas. Sin embargo, la artista supo que su trabajo fue utilizado cuando compró una copia de The Dark Side of the Moon y escuchó la canción.
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