Los británicos, provenientes de Leeds, se presentaron por cuarta vez en nuestro país, aunque esta era su primera visita en solitario. El show, que tuvo que ser re programado, se terminó realizando en La Trastienda (inicialmente iba a ser en Museum).
La banda formada por Ricky Wilson (vocalista), Andrew ‘Whitey’ White (guitarra), Simon Rix (bajo), Nick ‘Peanut’ Baines (sintetizador, teclado) y Nick Hodgson (batería) se encuentra de gira como antesala al lanzamiento de nuevo material que se espera para fines de este año.
A eso de las 21 horas la banda salió al escenario y la euforia se desató cuando comenzó a sonar el hit de su primer disco “Everyday I Love You Less and Less“. Un Ricky Wilson barbudo y con campera de cuero no tardó en acercarse para cantar sus estrofas casi entre el público. Desde el comienzo la banda salió con una gran actitud, como si fuese un grupo nuevo tocando en un bar que se esmera por ganarse al público. La actitud rockera continuó con “Ruffians on Parade“, un tema perteneciente a su último disco Education, Education, Education & War de 2014.
A continuación “Everything Is Average Nowadays” fue otra gran dosis de energía que el público cantaba sin parar. Luego de ese comienzo bien arriba, la gente no tardó en entonar el clásico cántico: “oléee, oleee, oleee, Kaiser, Kaiser”. Después de “Little Shocks” llegó el turno de presentar la primera canción nueva de la noche: “We Stay Together“.
Luego de esta tanda, el clima decayó un poco producto de ir intercalando hits de sus primeros y exitosos materiales como Employment (2005), Yours Truly, Angry Mob (2007) y Off with Their Heads (2008) mezclado con discos más recientes, como The Future Is Medieval (2011) y el ya mencionado Education, que no tuvieron tanto éxito ni mostraron grandes avances a nivel compositivo. Los tres temas nuevos que sonaron: “We Stay Together“, “Parachute” y “Hole In My Soul” evidenciaron un nuevo enfoque musical, más asociado a los inicios del britpop de la mano de bandas como Pulp o Suede.
Continuando con el show, esa tónica siguio repitiendose. Hits como “Never Miss a Beat” y “Modern Way“, intercalados con temas nuevos (“Parachute” en este caso), para luego dar paso al tema que todos estaban esperando: “Ruby“.
Cómo se dice “peanut” en español preguntó Wilson antes de presentar al tecladista Nick ‘Peanut’ Baines a lo que el público no tardo en responder: maní (claro, hubo alguien que hasta esbozó un “manicero” entre risas). La primera parte del show cerró con el sencillo “Coming Home” pero claro, todavia quedaba tiempo para los bises.
“Hole In My Soul“, otro de los temas nuevos, fue el tema elegido para volver. “Misery Company” le siguió y para el final se despacharon con el potente “Oh My God“, intercalado con una partes de “Na Na Na Na Naa“.
Así, luego de un show corto pero potente (1 hora y 20 minutos de duración) la banda brindó un show íntimo para los fanáticos y mostró tres canciones nuevas de su próximo material. La gran pregunta es si Kaiser Chiefs podrá volver a posicionarse como referente del britpop o si continuará buscando su rumbo.
Setlist
“Everyday I Love You Less and Less”
“Ruffians on Parade”
“Everything Is Average Nowadays”
“Little Shocks”
“We Stay Together”
“Never Miss a Beat”
“Modern Way”
“Parachute”
“Ruby”
“Take My Temperature”
“The Angry Mob”
“I Predict A Riot”
“Cannons”
“Coming Home”
“Hole In My Soul”
“Misery Company”
“Oh My God”
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Fotografía principal: Matías Casal