Abril se presenta como un mes histórico para el mundo de las batallas de freestyle: en sus cuatros fines de semana habrá una FMS (Freestyle Master Series) en cada país de la serie. La apertura, el 7, le tocó a Chile; su segunda patada a Argentina, el 14, y resta esperar por las de México y España que se darán el 20 y 27, respectivamente.
Además de las expectativas que giraban en torno a la de Chile y México por ser la novedad, los que consumimos este contenido estábamos ansiosos por el regreso de la Argentina para ver qué tan bien se acoplarían los nuevos Sub y Nacho, y qué tan bien se mantendrían los MCs de la temporada pasada. Pero esta fecha, que se realizó en el Teatro Quality Espacio, rompió con todas las predicciones previas. Analicemos, batalla por batalla, qué se esperaba y qué pasó en cada una de ellas.
MKS vs Stuart
Stuart terminó la temporada pasada en una posición deseada para sus inicios de 2018: había entrado a la liga por la puerta trasera y siendo una sorpresa. Algo que, al público de las batallas que no es de perdonar errores, no le gustó y se hizo saber mediante muchísimo hate. Pero al finalizar la primera temporada con la victoria heroica a Replik, consiguió el cariño de la gente y permaneció entre los diez mejores del país. MKS, por su lado, no tuvo el mejor de los desempeños a pesar de haber quedado tercero el año pasado y, por eso, todos pensábamos que Stuart se llevaría los primeros tres puntos en Córdoba. Pero no fue así: el poco volumen argumental y algunos picos muy altos y otros muy bajos dieron como resultado una batalla insípida sin acotes memorables (salvo MKS con la temática “accidente”) y una réplica que se llevó MKS justamente porque supo responder al detalle cada punch que Stuart hacía.
Cacha vs Replik
Se repetía la batalla de la última jornada de la primera temporada de FMS Argentina, pero esta vez en circunstancias radicalmente distintas: Replik en ese entonces no se jugaba ni el campeonato ni el descenso y Cacha debía llevarse los tres puntos sí o sí para depender de otros resultados (que no terminaron siendo los que le convenían) por ende, no se dejó nada. El fenómeno que desató Cacha (bautizado “cachamanía” por el periodista Juan Ortelli) desde su descenso el año pasado hasta hoy tuvo una fluctuación nunca antes vista. Debido a su baja de la liga profesional, Cacha fue contratado por ocho eventos internacionales en distintos países latinoamericanos y desató una cantidad innumerable de memes (“A Cacha no le pagan caché para los eventos, él les paga para que lo contraten”) y, también, en dos de estos tantos eventos internacionales, el público lo recibió al son de “Cacha, hermano, ya eres mexicano”. Pasó del amor al odio varias veces en estos meses por la saturación de su personaje en los eventos. Infranich, actual jurado de FMS, definió en una frase lo que representa Cacha hoy en día: En Argentina, lo infravaloramos, afuera suelen agrandar su figura. Y fue tal cual se esperaba, Cacha no mostró su versión que lo hizo campeonar junto a Dominic en Pangea, trató de jugar en el terreno técnico que lo caracteriza a Replik y que le había dado frutos el año pasado, pero esta fecha no. Se vio una batalla desinflada, con un Replik que sigue con esa tesitura espiritual (“Vengo a destruir a mi propio humano”) ahora bajo su pseudónimo Manucho Conflictos. Acompañada con problemas técnicos en los micrófonos, la batalla decantó en réplica al igual que la anterior. Los dos puntos correspondientes a la victoria post réplica se los llevó Cacha.
Klan vs Nacho
Este choque tenía buenos condimentos: venganza por la última edición de Red Bull, expectativas por ver la actuación de Nacho, uno de los dos debutantes, y curiosidad por ver cómo encaraba Klan la batalla, que días antes había posteado en Instagram que se arregló la dentadura (estímulo con el que todos los competidores lo atacaban en sus batallas). Al mismo tiempo, y a pesar de que son dos MCs que centran sus batallas en el ataque directo, era una batalla que ponía frente a frente a dos humanos con personalidades chocantes: Nacho, por su lado, representando la perseverancia y el entrenamiento constante; y Klan, por otro, la energía que hay que poner a este tipo de batallas porque son las que te dan el pan para que lleves a la mesa. Hablando de pronósticos, todos pensaban que para Nacho iba a ser simple llevarse los tres puntos por su asiduo entrenamiento y porque Klan aún no logró adaptarse 100% al formato que propone la Freestyle Master Series. Sin embargo, este último aprovechó las trabadas y faltas de aire de Nacho (que tienen origen, tal vez, en esta inexperiencia) para convertirse en el único en llevarse el pleno esa jornada y quedar primero parcialmente.
Sub vs Trueno
La liga, con los dos ascensos, se nutrió de un interino más: Sub, que vino para darle un soplo de aire fresco a las batallas de 2019. A priori, entre todos se pensaba que es una lástima que, en tu fecha debut, te toque contra Trueno, uno de los competidores más amados por el mundillo (tiene un fandom y sus integrantes se hacen llamar “mateistas”). A pesar de ello, Trueno no logró conectarse en las primeras tres rondas con los estímulos y Sub sí, lo que hizo sumar varios puntos. En la ronda 4, la de minutos libres, los MCs propusieron, sin previo acuerdo, otra ronda de personajes contrapuestos: padre policía (el de Sub) vs. padre rapper (el de Trueno). Para los que sean ajenos a esta cultura, ser rapero y tener algún allegado policía es una contradicción bastante gorda. Así que Trueno le saltó a la yugular a Sub y dedicó todo su minuto a construir rimas contra el padre. Sub, en su intervención, inteligentemente contestó: “Mi papá sale a defender a la Argentina para poderle traer la comida a mi familia.” Es importante esta rima porque es de las que hacen que se desequilibre la balanza. Sub logró remontar su lucha y tirarle encima a Trueno el grito del público (que también suele enfervorizarse cuando se habla del rap antiestablishment) admitiendo que sí, que su papá es policía, pero lo hace con un fin: darle un plato caliente a su familia. Además, en una situación como la que atraviesa el país, nadie está en situación de cuestionar los medios para llenarse el estómago. Después de su polémica réplica el mendocino ganó la batalla por unanimidad.
Dtoke vs Papo
El clásico argentino por excelencia. En esta batalla se vio tanta sangre como en Pulp Fiction cuando Vincent dispara accidentalmente a Marvin en el auto. Y es que los años de amistad que tienen los MCs Detoke y Papo les permitieron tirarse con todo sin miedo a arruinar la relación o terminar a los golpes. Podemos extraer perlas como “No te gusta la plata y ¿yo soy un ignorante? ¿Les contamos tu contrato con (la) energizante?” o “Yo soy Dtoke (…) el que se hace el villero y se mudó a Palermo” del marplatense o “Hermano, sos un desastre. Las rimas que tiró contra Replik y contra Cacha antes de las batallas (me) las cantaste” de Dtoke. Esta batalla había quedado pendiente en la temporada pasada y los dos recompensaron al público dándoles lo que ellos querían: que se batan a duelo sin piedad como dos gladiadores en el Coliseo romano. Y lo hicieron, concluyendo con un Dtoke demostrando (otra vez) que no está oxidado y ganando la batalla tras una réplica. También, quedó claro que Papo se vuelve débil en los 4×4 y es el punto que tiene que trabajar si de verdad quiere aprovechar la ausencia de Wos este año.
Unas palabras finales
La primera fecha de FMS Argentina, que pudo haber sido opacada por la novedad de las otras dos, generó revuelo por sus resultados y dio de qué hablar. Cabe destacar y recalcar que fue solo la primera jornada. Con los MCs fuera de ritmo, un nuevo paradigma sin Wos y Dani (que eran los que más tráfico otorgaban a los streamings y videos oficiales) y beats nuevos de Zone que reafirman su liderazgo en el mestiere, se abre una nueva temporada que va a dar más jugo y un abanico de resultados más amplios que la anterior. Los cruces de la segunda fecha, que será en Santa Fe, ya están anunciados y, esperamos, que se sigan rompiendo los prodes.