El trío Covenant, oriundos de Suecia, se presentaron la noche del miércoles por segunda vez en Argentina, en la disco porteña Niceto. Su primera visita fue en el 2007 y, según afirmaron los miembros de la banda, tenían muchas expectativas sobre la vuelta al país.
Eskil Simonsson (líder de la banda), se veía entusiasmado por seguir cantando, de hecho, nos regaló una canción a capela y compartió su emoción al decir “Siempre es un honor tocar una más, vengo de un pequeño pueblo de Suecia y ahora estoy aquí, es increible”, dejando de lado su larga trayectoria, como si fuera la primera vez que tocaba en público. Un acto de grandeza, ya que a pesar de ser una de las bandas más influyentes de la escena techno-pop europea, conservan la humildad.
La intensa voz y el sofisticado sonido de los sintetizadores y las luces, que jugaron un papel muy importante, fueron más que suficientes para erizarnos la piel y hacernos bailar. Casi en el final, Eskil, que antes de cada tema hizo pequeñas charlas a modo de introducción, confesó “Siento conocerlos desde siempre, compartimos la pasión por la música y eso nos hace amigos” e invitó a todos al after show en un subsuelo de la ciudad de Buenos Aires.
La presentación, que duró casi dos horas, se dio en marco de una gira latinoamericana, en la que están presentando su último álbum Modern Ruin e hicieron un tema inédito, que será parte del nuevo trabajo discográfico que lanzarán el próximo año. Cabe destacar la excelente participación del argentino Gabriel, quien reemplazó a Daniel Myer, miembro que no pudo venir por cuestiones de salud.
Es difícil olvidar un recital cuando supera las expectativas, hay sonidos que siguen en la cabeza por un largo tiempo, de todos modos, esperamos tenerlos de vuelta en Argentina antes de que esto suceda. Siempre hay una tercera vez.