Los dramas policiales son unos de los contenidos más vistos del catálogo de Netflix. Al parecer nada le gana a una buena historia de policías versus criminales. Sin embargo, actualmente existe cierta variedad en cuanto a esta clase de producciones, y el servicio de streaming incluye obras provenientes de diferentes países, algunas de ellas con enfoques interesantes.
Recomendamos tres ficciones de ese género disponibles en Netflix:
Wanted
Esta serie australiana se centra en dos completas desconocidas que se escapan juntas después de ser testigos de un homicidio del cual luego son acusadas. Ellas se fugan ante la imposibilidad de probar su inocencia, pues hay policías corruptos involucrados en el caso. Rebecca Gibney, Geraldine Hakewill y Kerry Fox estelarizan esta obra creada por la propia Rebecca junto a Richard Bell. Hasta la fecha, esta tira cuenta con tres temporadas.
Undercover: operación éxito
Esta producción europea cuenta apenas con una temporada en cuyos episodios dos agentes infiltrados se insertan en las labores de un narcotraficante mientras se hacen pasar por una pareja que visita el lugar donde pasa sus fines de semana. Lo más inquietante de todo es que se trata de una historia inspirada en hechos reales. Sus protagonistas son Tom Waes, Anna Drijver y Frank Lammers. Lo más celebrado sobre esta entrega es su guion ingenioso y sus excelentes actuaciones, pese a tener un elenco poco conocido.
Unidad 42
Este show producido y ambientado en Bélgica se centra en un policía viudo que lidera una unidad especializada en ciberdelitos. Él se alía con una antigua hacker para identificar y agarrar criminales expertos en tecnología. Otros temas que se abordan en sus episodios son la muerte, la soledad y la frialdad del modo de vida de las personas en algunas urbes. Ciertos críticos definen a esta serie como una entrega con espíritu pesimista y gris, pero sin embargo, entretenida para cierto público.