La serie Porno y helado sigue una historia simple pero efectiva. Todos los viernes a la noche, Pablo (Martín Piroyansky) lleva helado y Ramón (Ignacio Saralegui) pone porno en la tele de su casa. Esta dupla de amigos, el arquetipo de losers, crea una banda ficticia llamada Los Débiles Mentales para conquistar chicas y cuando pegan su primer hit suman como manager a Ceci (Sofía Morandi).
En su primera temporada, esta comedia de enredos, con destellos de buddy movie y humor políticamente muy incorrecto supo ser uno de los grandes éxitos del streaming durante el año pasado, y este mes regresó con su segunda temporada en Prime Video. En calidad de showrunner, director, coguionista y protagonista, Piroyansky asegura que el éxito de la primera fue completamente inesperado.
“Arrancó tranquilo, pero después del estreno de División Palermo, a la gente le pareció gustar ese tipo de humor y se sumaron a ver Porno y helado -cuenta en conversación con Indie Hoy-. La idea es entretener, poder suspender la mente y simplemente pasarla bien un rato. Me gusta esta cosa de que todo sea muy mundano. Los personajes se mueven por lugares decadentes, se visten realistas excepto Ceci que tiene un look disparatado y arriba a diferencia de todos. La serie juega con lo inesperado de lo real y de la vida”.
La segunda temporada consiste de seis episodios de media hora -incluyendo un episodio botella que posiblemente sea el mejor hasta ahora- y es aún más desbordante, absurda e irreverente que la primera: los chicos se enfrentan a una secta rollinga, al peligro de pasar 10 años en la cárcel y a una tormenta apocalíptica, con tan solo segundos entre un chiste y otro.
“Volver a la serie fue hermoso -cuenta Sofi Morandi-, conocemos mucho los tiempos de cada uno y aunque no lo puedan creer, no hay tiempo ni espacio para la improvisación. Es todo gracias al maravilloso guion de Piro”. “Nos dirigimos entre todos, nos hacemos comentarios -agrega Nacho Saralegui-. Además, en esta temporada se suman Gime Accardi, Ángela Torres y Matias Mayer, que hicieron todo aún más fácil”.
Gimena Accardi aparece como parte de una secta rollinga que come panchos y que da lugar a un divertídisimo intercambio de choques generacionales. “Yo fui rollinga posta, así que fue como volver a los 90 para mí -asegura la actriz-. Sumarme a este elenco fue un placer absoluto. Amo la primera temporada así que cuando me llamaron estaba lista para cualquier papel. Por suerte fue uno que me encantó, una loca linda con flequillo que se mete en quilombos”.
Algo particular de esta temporada es que, pese a tener un hilo conductor por detrás de todos, cada episodio abre y cierra una historia, permitiendo que la audiencia pueda disfrutarlos sin necesariamente conocer la trama completa. “Esto fue pensado desde la idea de volver a la sitcom vieja -explica Piroyanski-. Yo soy muy fan de las sitcoms de los 90, de los courtroom dramas, de Friends, así que quise tomar un poco ese formato. Por eso sumamos también un juicio a la historia, que creo fue la escena que más nos divirtió filmar. Queríamos que cada episodio tuviera cierta independencia”.
En cuanto al título de la serie, Piroyanski admite que Porno y helado no fue siempre el título que tenía en mente para la serie. “Durante muchos años el proyecto se llamó Cómo conseguir chicas en honor al disco de Charly García y porque era lo que los protagonistas querían lograr -cuenta-. Pero con el tiempo me pareció que quedaba viejo, medio machirulo. Nos decidimos por Porno y helado porque además de ser lo que hacen los protagonistas, es una tradición re copada”.
Los altibajos de manejar una banda de rock no terminan acá, dando lugar a que Porno y helado siga por muchos más años y posiblemente se convierta en una serie de culto. “Me imagino en 30 años a las escuelas dando Porno y helado como ejemplo de todo lo que no se debe hacer”, dice entre risas Morandi. Todos los protagonistas están de acuerdo que la historia da para mucho más y quieren seguir explorando, jugando y divirtiéndose con Pablo, Ramón y Ceci. Es por eso que están tan agradecidos al público por “suspender cualquier juicio y simplemente divertirse”.
Porno y helado está disponible en Prime Video.
