A pesar de haber concluido hace casi 20 años, Friends sigue siendo una de las sitcoms más populares. Con todas las temporadas disponibles en HBO Max, la serie continúa siendo vista por miles y miles de usuarios alrededor del mundo: muchos fanáticos que vuelven a verla y otros que recién ahora la están descubriendo.
La serie suele ser noticia cada tanto, especialmente cuando actores y creadores reflexionan sobre lo que se hizo mal en aquellos años, como por ejemplo la falta de diversidad. Sin embargo, ahora ha salido a hablar una escritora del show, Patty Lin, quien sacó a relucir detalles poco agradables de su tiempo en la producción.
En su libro de memorias titulado End Credits: How I Broke Up with Hollywood, la guionista (que trabajó también en Freaks and Geeks y Breaking Bad) recuerda de manera negativa su experiencia en Friends, alegando que los miembros del elenco eran “agresivos” y que trabajar con ellos era “terrible”.
Actores descontentos, chistes saboteados y charlas agresivas
Lin, quien escribió episodios para la séptima temporada, comentó: “Los actores parecían descontentos de estar encadenados a un viejo show gastado cuando podían estar expandiendo sus horizontes, y sentí que constantemente se preguntaban cómo cada guion les serviría específicamente” (vía TIME).
La guionista asegura que cuando el elenco estaba descontento con algún chiste, lo saboteaba para que lo vuelvan a escribir. Según ella, “docenas de buenos chistes iban a la basura” porque los intérpretes arruinaban las líneas a propósito. Además, recuerda que a la hora de discutir el guion, nunca tenían nada bueno para decir: “Era la primera oportunidad que tenían los actores para expresar sus opiniones, y lo hicieron. Rara vez tenían algo positivo que decir, y cuando planteaban problemas no sugerían soluciones factibles”.
“Al verse a sí mismos como guardianes de sus personajes, a menudo argumentaban que nunca harían o dirían tal o cual cosa. Eso fue ocasionalmente útil, pero en general estas sesiones tenían una calidad terrible y agresiva que carecía de toda la ligereza que esperarías de la realización de una comedia de situación“, continuó para agregar: “No aprendí mucho, excepto que nunca más quise volver a trabajar en una comedia”.
