Más de una década después de que “Adele – Week 7”, en último episodio de la tercera temporada, fuera emitido por HBO, In Treatment, la serie desarrollada por el colombiano Rodrigo García, volvió a la pantalla de la cadena premium.
Basada en el drama israelí de nombre BeTipul, la tira sigue al Dr. Paul Weston (Gabriel Byrne) es un psicoanalista de cincuenta años que, además de atender a sus pacientes, acude a la consulta de Gina (Dianne Wiest), una psicoanalista ya retirada, que hace años fue su supervisora profesional.
Ahora, con la llegada de una nueva entrega, García y compañía decidieron patear el tablero e incluir a una nueva terapeuta, otros pacientes y un contexto actual. Es esta oportunidad, todo gira en torno a Brooke Taylor (Uzo Aduba), quien reemplaza a su colega Weston en el rol protagónico mientras intenta ayudar a la gente en Baldwin Hills, Los Ángeles.
Sin embargo, mientras lidia con sus pacientes Eladio (Anthony Ramos), Colin (John Benjamin Hickey) y Laila (Quintessa Swindell), Taylor intenta transitar un tiempo difícil en su vida producto de la muerte de su padre.
Jennifer Schuur, una de las productoras ejecutivas de la serie, afirmó: “Habíamos creado el personaje de la doctora Brooke Taylor primero, y luego recuerdo el momento en el que nuestros directores de casting nos contaron que Uzo Aduba podría estar disponible y que podría estar interesada. Casi se me sale el corazón del pecho”.
“Primero pensé que no había manera de que pudiésemos tener tanta suerte de tratar de convencerla para que hiciese este trabajo. Sorprendentemente, ella entendió qué tratábamos de hacer. Ella también propuso cuestiones fundamentales sobre lo que queríamos hablar en la serie. Y también aportaba su propia experiencia. A veces ocurre la magia”, agregó.
Además, con respecto a los temas que la producción aborda (racismo, privilegio de los blancos, ignorancia, dolor, sexualidad y sexismo), Schuur comentó que “forma parte de lo que hace que esto sea una reinterpretación moderna del programa. Una versión inspirada”.
“Creo que en In Treatment, la original, hubo una suerte de sentimiento de mundo interno pequeño para los personajes y el mundo exterior no necesariamente ingresaba a la sala, o se trataba en las sesiones, más allá de las maneras personales e interpersonales”, desarrolló.
Con respecto al regreso de la serie y su participación tras las cámaras, Jennifer dijo: “Soy una enorme fanática de la serie original. Me encantó. Pero también soy una veterana con 17 años de terapia semanal con el mismo terapeuta. La terapia es una de las relaciones más fundacionales de mi vida y es algo que siempre tengo muy cerca del corazón. Entonces, sentí que aquí había una oportunidad de explorar mi propia experiencia de vida en este ámbito y poder hacerlo de una manera más significativa, esperemos”.
Finalmente, al hablar sobre lo que los fanáticos de In Treatment pueden esperar de esta entrega, Schuur, quien también trabajó en Big Love y Hellcats, comentó: “No queríamos separarnos de la serie original. Somos muy fanáticos y queríamos asegurarnos de que el legado se transfería de una manera significativa. Pensamos sobre cómo conectar el pasado con el presente. Casi te diría que funcionaba tener al Dr. Paul Weston de la serie original como el supervisor de la doctora Brooke Taylor, de la misma manera que tuvimos a Diane en las primeras dos temporadas de la serie original, una manera muy orgánica de traer la vieja serie al presente. No tenés que ver la serie pasada para disfrutar de la actual”.