No caben dudas de que la música es una parte fundamental de cualquier proyecto audiovisual, especialmente de las películas y series. Es por eso que, en ocasiones, se invierten grandes cantidades de dinero para la utilización de ciertas canciones en producciones. Tal fue el caso de Mad Men, una tira en la que, para utilizar un track de The Beatles, su creador Matthew Weiner decidió a desembolsar una fortuna.
El show original de la cadena AMC protagonizado por Jon Hamm y Elisabeth Moss se sitúa en los años 60, década en la que John Lennon y compañía tomaron al mundo por sorpresa, por lo que la elección de uno de sus temas para un episodio era más que acertada. El problema fue que Lionsgate, la productora a cargo de la serie, tuvo que negociar para tener los derechos de la canción “Tomorrow Never Knows”, del álbum Revolver.
Weiner intentó durante mucho tiempo incluir a los Fab Four en el soundtrack de su creación y en alguna oportunidad manifestó que la dificultad del asunto no tenía nada que ver con el dinero: “Ellos están preocupados por su legado y por su impacto artístico”. Tras años de espera, el deseo de Weiner se volvió realidad en 2012, cuando Lionsgate le pagó 250 mil dólares a Apple Corps -la corporación fundada en 1968 por los integrantes de The Beatles para cuidar sus intereses artísticos y personales-, por “Tomorrow Never Knows”.
De esa manera, el track se convirtió en la primera canción del conjunto de Liverpool en ser cedida para un proyecto de este tipo en cinco años, según confirmó Jeff Jones, el presidente de Apple Corps en 2012.