Morir de placer es uno de los recientes estrenos de Disney+. Se trata de una serie basada en hechos reales, cocreada y escrita por Kim Rosenstock & Elizabeth Meriwether. En un mundo en el que la sexualidad de las mujeres es cada vez más libre, elegida y vivenciada desde diferentes experiencias, Morir de placer es una serie actual así como emotiva, divertida y osada.
De qué se trata
La sinopsis reza:
“Cuando Molly (Michelle Williams) es diagnosticada de cáncer de mama metastásico en estadio IV, decide dejar a su esposo, Steve (Jay Duplass). A partir de entonces, comienza a explorar por primera vez en su vida la amplitud y complejidad de sus deseos sexuales. Molly encuentra el valor para lanzarse a esta aventura gracias a su incondicional amiga Nikki (Jenny Slate), una mujer cuya lealtad y cariño hacen que cualquiera quiera levantar el teléfono y llamar a esa amiga de inmediato”.
Quiénes actúan
La serie está protagonizada por Michelle Williams (como la protagonista, Molly), Jenny Slate (como su mejor amiga, Nikki), Jay Duplass (como el marido de Molly, Steve), Kelvin Yu, David Rasche, Esco Jouléy, Rob Delaney y Sissy Spacek.

Qué dicen las críticas
Morir de placer está recibiendo excelentes críticas que destacan su gran emotividad, así como el balance con la comedia. En Collider dicen: “Consigue crear un viaje bastante agradable, lleno de tristeza, por supuesto, pero también de risas y alegría de vivir”. Por su parte, desde Mashable afirman: “Una combinación potente y lacrimógena que consigue aligerarse en un notable acto de equilibrio”.
Desde Entertainment Weekly advierten sobre la fuerza dramática de la serie: “Tiene las herramientas para dejarte satisfecho y completamente (emocionalmente) agotado“. Finalmente, en Micropsia Cine aportan: “Lo mejor de la serie pasa por su lado humorístico (…) recae en clichés poéticos más convencionales y/o trillados. Más allá de esos problemas, es muy buena”.
El podcast en el que se basa
La serie está basada en el podcast Dying For Sex perteneciente a Nikki Boyer, amiga de Molly. En este espacio, Molly (quien falleció en 2018) decidió compartir su historia de lucha y su experimentación sexual: “Mi exploración sexual fue una forma de decir: ‘No estoy lista para morir’”. Durante la enfermedad redescubrió su sexualidad apagada, se reconcilió con su madre y llegó a una gran conclusión que expresó en el último capítulo del podcast: “El regalo que me da la muerte es enamorarme de mí misma”.
Mirá el tráiler de Morir de placer.