Peppa Pig está pronta a cumplir 15 años al aire, pero a pesar de su largo tiempo en la pantalla chica sigue siendo uno de los dibujos animados más vistos entre los pequeños.
En un intento por descubrir qué es lo que hace tan popular a esta creación de Neville Astley y Mark Baker, el ilustrador Javier Alejandro N de Cagtén Ediciones, explicó en una entrevista con el medio chileno Página 7 los posibles motivos de la fascinación por el personaje británico.
Según detalló el artista, lo primero que se aprecia en Peppa Pig es la simpleza de su creación:
“Se ve que es una serie fácil de producir, ya que la animación que tiene es bastante limitada hecha por software, lo que al principio del 2000 se conocía como la animación flash.”
Sumando a lo anterior, Alejandro añade que “se nota que no deben redibujar, haciendo de nuevo los clips de animación de cada episodio porque funciona como si fueran trozos de papel, cortaras cada trozo de Peppa Pig y la fueras moviendo.”
Por otro lado, Javier destacó la sencillez de los trazos y los colores del show, los cuales serían algunos de los factores que deslumbran y más llaman la atención de los pequeños:
“Los dibujos son bastante simples, no hay nada que entorpezca la animación, y a la vez tiene colores atractivos y formas reconocibles para los niños, para que ellos se puedan familiarizar con lo que están viendo.”
El ilustrador también explicó que, a pesar de que para la gente grande la realización de la serie pueda parecer básica y hasta un poco tonta, para su público target, es decir, chicos y chicas de entre tres y seis años, es un programa simple de seguir:
“Para ellos es bastante fácil de ver la historia porque no hay elementos que ensucien a los personajes, por ejemplo, los escenarios son muy simples: si están jugando a la pelota sólo hay pasto y los arcos, entonces hasta un niño muy chico puede fascinarse con las imágenes.”
Otros de los factores que el también diseñador gráfico destacó de Peppa Pig son la duración de sus capítulos (no pasan de los 15 minutos), el relato de distintas vivencias con las que los más pequeños pueden sentirse identificados fácilmente, el hecho de que cada personaje es un prototipo marcado de los integrantes de la familia que todos los niños pueden tener en su núcleo más cercano, el que todos los personajes son animales y un estilo de animación bastante claro.
“Son clips cortos para que los niños puedan entender y seguir una historia. Es como una función de teatro que no tiene muchos elementos y se centra sólo en los actores. Eso es lo que debe tener una animación para que cautive a los niños“, expresó Javier Alejandro N.