Quienes hayan visto The Blacklist, probablemente estén de acuerdo en que James Spader encaja perfecto en el rol del criminal Raymond Reddington. Después de siete temporadas –y con una octava en camino- cuesta imaginar a otro actor en el centro de esta serie de NBC.
Sin embargo, parece que Spader no fue la única opción para el rol protagónico. En un reconocido sitio de cine y televisión, John Eisendrath (productor ejecutivo) y el creador de la serie Jon Bokenkamp hablaron de lo que fue la búsqueda de los actores para los personajes principales: por un lado, el mencionado “Red” y por otro, la perfiladora del FBI Elizabeth Keen.
Eisendrath recuerda la primera vez que Megan Boone hizo el casting para Liz:
“Buscamos bastante para el personaje de Liz. El casting es muy subjetivo, pero cuando Megan entró -y audicionó-, fue una de esas audiciones en las que, de inmediato, pensamos: ‘hay algo específico en ella’. Sentí que había una oscuridad a la que podía acceder. […] Cuando quieres elegir a alguien desconocido para un rol tan importante, debes meter un poco de presión para asegurarte de que todos estén de acuerdo y cómodos con la decisión. Y nosotros realmente nos sentimos seguros, desde el principio, de que ella era la persona indicada”.
¿Y qué pasó con Spader? El productor se mostró muy agradecido por la manera en que el actor entendió el personaje y no se guardó ningún elogio:
“Es difícil para mí pensar que él nunca interpretó a un criminal en el pasado porque tiene la habilidad de ser misterioso, peligroso y pícaro, de una manera en la que es complicado dilucidar si es bueno o malo. […] Fuimos muy afortunados de que James encajara tan bien con el personaje que escribimos. Fue muy divertido verlo convertirse en la persona que ideamos”.
Spader fue confirmado en el rol tres días antes de filmar el piloto y, según cuentan los productores, lo vieron en persona recién el primer día de producción. Pero antes de decidirse por el actor estadounidense, tuvieron otros nombres en mente.
¿Quién podría haber interpretado a Red? Aparentemente, ese personaje fue ofrecido a Kiefer Sutherland –la estrella de 24-, pero entre los considerados también estuvieron Richard Gere, Bryan Cranston y Pierce Brosnan.
Más allá de la danza de nombres, está claro que todos quedaron más que contentos con lo hecho por Spader y hoy es imposible pensar en otro Raymond Reddington.