Aldo Sessa, el prestigioso fotógrafo y cronista visual de la Buenos Aires moderna, le donó al Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (MAMBA) 60 fotografías, entre las que se incluyen instantáneas citadinas de diferentes locaciones del mundo, imágenes de su serie del Teatro Colón, abstracciones y trabajos fotoperiodísticos.
El material que llegó para quedarse en el MAMBA fue seleccionado de entre más de 4 millones de copias que yacían en un archivo de Sessa.
“El Moderno es como mi casa”, confesó el genio detrás del lente durante el pequeño acto para cerrar el traspaso de su legado. “Cuando uno entra a un departamento vacío, va poniéndole sus cosas y cuantas más cosas pone, más siente su casa”.
Cabe recordar que en 2018 el MAMBA le dedicó a Sessa una retrospectiva de 700 instantáneas seleccionadas por la directora del espacio, Victoria Noorthoorn, quien se sumergió en el archivo de cuatro millones de imágenes para la elección y que esta vez escogió las fotos que pasaron a formar parte del establecimiento porteño.