En la historia reciente del cine existen algunas ficciones filmadas en su totalidad con un celular. Los avances tecnológicos permitieron que la calidad de las cámaras de teléfonos alcancen una superior y la brecha que las separaba de una cámara profesional sea cada vez menor. Pero hablar de calidad no es solo hablar de resolución y de textura, sino de contenido y revolución. Porque para un arte tan caro como lo es el cine, el estándar de con qué elementos se debe filmar no es más que una imposición de la elite.
Hay directores que usaron este recurso como un atajo económico, o quizás por publicidad, pero también hay otros que lo eligieron por una decisión ética y estética. Esta lista no se centra en esas diferencias, sino en las obras que tomaron el riesgo cinematográfico de explorar algo nuevo. El hacer cine es una práctica que puede estar más cerca que las brillantes luces de los grandes estudios; se puede encontrar en cualquier calle, vibrando en un bolsillo y llamando al futuro.
Tangerine
2015 – Dir: Sean Baker
Una de las películas con este formato que tuvo más repercusión y estuvo en boca de toda la crítica cinematográfica fue Tangerine de Sean Baker. Se trata de un film que no solo dialoga con el uso de la tecnología en su forma, sino que remonta a todo un cine underground callejero, vertiginoso y con una impronta social latente.
Tangerine crea un universo colorido pero con las sombrías deficiencias de un sistema marginal y desolador. Su protagonista, Sin Dee Rella, luego de pasar un pequeño tiempo tras las rejas, busca por todo Los Ángeles a uno de los proxenetas que deambulan por las noches para hacerle notar su descarada forma de actuar.
Baker encuentra en cada personaje una luz que logra conmover y reflexionar emotivamente, un rasgo bestial que no lo aleja de la realidad criminal y una llama para encontrar lo erótico en una noche triste y brillante en vísperas de navidad. Baker continuó Tangerine con la excelente Proyecto Florida (2017), estableciéndose como uno de los grandes nombres del cine independiente norteamericano actual.
Unsane
2018 – Dir: Steven Soderbergh
El aclamado director Steven Soderbergh incursionó en la aventura de filmar una largometraje de ficción con un iPhone. Director de una filmografía muy variada que va desde obras como la Palma de Oro de Cannes Sex, Lies and Videotape (1989), su visión sobre el escritor checo en Kafka (1991), la película popular de trajes y robos La gran estafa (2001), las películas del Che Guevara con Benicio del Toro y hasta el lamentable remake de Solaris de Andrei Tarkovsky.
Para Soderbergh filmar una película con un teléfono celular no era una cuestión de presupuestos, sino un reto más en su multiforme trayectoria. Unsane se centra en la desesperación de una mujer que vive el acoso físico, mental y burocrático, en una institución terrorífica donde gobierna el desamparo y el oportunismo en la salud es un negocio.
Night Fishing
2011 – Dir: Park Chan-Wook
Este mediometraje de Park Chan-Wook, director reconocido por su trilogía de venganza de Sympathy for Mr. Vengeance (2002), Oldboy (2003) y Sympathy for Lady Vengeance (2005), es un experimento muy cautivador en varios sentidos. Night Fishing contiene una profunda gota de terror que subyace de su trama y se combina con tradiciones de la cultura oriental. Un territorio donde el miedo y el humor se disipan en la niebla, logrando que el encuentro con un cadáver genere tanta impresión como también un poquito de comedia.
El trabajo del cineasta surcoreano se enfoca no solo en adaptar la tecnología a otra forma narrativa para demostrar que se puede, sino que explota su extrañeza para volverla favorable al género. Para eso experimentó con un lente adaptándola a su iPhone 4 para generar otro tipo de profundidad de campo, en una pequeña historia donde el escenario lo es todo, mientras la sensación de espanto se esconde en el lago detrás de las malezas.
Olive
2011 – Dir: Patrick Gilles
Olive está lejos de considerarse un proyecto independiente a pesar de su proeza técnica. Filmado con un Nokia 8 y adjuntando un lente para tener más detalles del foco, esta película es una inversión de empresas como Facebook, teniendo de actriz a Randi Zuckerberg, hermana de su fundador, y financiada por parte del equipo de la red social. Y también de Skywalker Sound, la rama sonora de la productora de George Lucas.
Este es un ejemplo donde el recurso no vino a resolver un problema de dinero sino a buscar otras alternativas aunque con los ojos dentro del sistema. La película trata de una niña con poderes sobrenaturales sobre la vida de unos desconocidos. Se resalta la actuación de la recientemente fallecida Gena Rowlands, acostumbrada a trabajar en los experimentos de John Cassavetes.
Oso polar
2017 – Dir: Marcelo Tobar
Una película mexicana de muy bajo presupuesto que hizo a su director, Marcelo Tobar, enamorarse del proceso de filmar ligero y sin excentricidades. Oso polar es una historia de viajes, tanto viajes en movimiento al mejor estilo road movie, como también viajes temporales en la llaga del sentimentalismo de los personajes que se conocen desde hace tiempo.
Pero las cosas con el tiempo cambian, y haber estado tanto tiempo en la distancia no parece algo tan productivo para una aventura sobre ruedas. La película disfruta del recorrido de los personajes como una autopista directa hacia sus emociones más secretas.