Adiós entusiasmo
Sección: Competencia oficial Vanguardia y Género – La extrañeza se queda en la casa como una niebla que no se ve pero se siente en todos los aspectos, no solo se escucha en fuera de campo, sino que también se percibe en los azulejos de los baños, en los espejos, en las notas de un teclado. Una atmósfera constante que planta un árbol y lo deja morir, los árboles mueren y siguen ahí, adiós entusiasmo. Una familia que respira constantemente esa niebla se le hace imposible comportarse como el mundo de afuera, como si al entrar a la casa todo cambia y a uno sólo le queda dejarse llevar y respirar, dejarse llevar por esa forma rarificada de encuadrar la situación, enfrentar la atmósfera, o lo que va quedando de esta y amoldarse. Los personajes lo entienden perfectamente, vacíos… adiós entusiasmo. La extrañeza en todos aspectos hasta en la repetición, extrañeza en la cámara que nos lleva como flotando como ella quiera, por donde quiera y que podamos sentirnos cómodos bajo un techo que aguarda no un sentimiento sino la ausencia de uno y eso ni siquiera se llama soledad, o vacío, sino otra cosa: Adiós entusiasmo.
Los personajes son peculiares porque ya la situación es rara de por sí, tres hermanas y un hermanito, su mamá encerrada en la voz de Rosario Bléfari, siendo cantante no canta, sino que alardea insultos o se ríe y hasta casi llorar; los que cantan son sus hijos que preparan una fiesta para festejar un cumpleaños tan extraño que sólo el cine nos puede dar. Aplausos y risas, se escuchan los insultos de alguien más allá, pero acá, detrás de unas paredes se despide al entusiasmo. Los hermanos tan distintos entre sí ya por necesidad de la situación, el vacío de una se llena con la inocencia de otra y un angelito que completa la ausencia, pero sólo su presencia no basta, sino que la necesidad de inventar un planeta va enganchado de actuaciones correctas. Esto da libertad en el punto de plantear las reglas, si el techo es un límite se puede construir todo adentro, crear puntos diferentes en cuanto lo espacial y hasta divergencias que te hacen cagar a puteadas los azulejos; el choque entre lo real y lo extraño se enfatiza y se talla en el árbol. Juampa Barbero
Dir: Vladimir Durán
Para volver a ver: Lunes 24, 16.10hs, Village Recoleta 5 – Jueves 27, 20.20hs, Village Caballito 8
Cícero impune
Sección: Competencia argentina – José Celestino Campusano vuelve a ser figura del BAFICI. El ya ganador del premio a Mejor director (por Placer y martirio, en 2015) continúa con su cine cooperativista y rupturista, acercándonos uno de los relatos más viscerales de su filmografía. Cícero impune nos muestra la historia de un sanador espiritual que droga y viola de sus clientas. La mayor particularidad de la película es que fue rodada en una ciudad de 400 mil habitantes en el Amazonas brasileño (de hecho, es una co-producción entre ambos países) y la estética de Campusano sigue intacta a miles de kilómetros de distancia. Personajes sórdidos hacen de este relato de 60 minutos una historia de justicia por mano propia: la película, como todas las del realizador, están basadas en hechos reales, con una intención antropológica del cine. Documentar, a través de la ficción, realidades por fuera de los medios tradicionales pero que son una constante en las vidas de los personajes. La misoginia y linchamientos están a la orden del día en esa ciudad que policía ausente, y los entramados políticos hacen que el pueblo tenga que hacer justicia.
Esta idea de cine antropológico aceita el proceso de creación de Campusano, quien tiene otros tres o cuatro proyectos todavía sin terminar. Todos con la misma premisa y el mismo proceso de trabajo: mostrar realidades con un ojo que no censura, que no puede censurar porque son las cosas brutalmente reales, tan reales como el aire que se respira, que Campusano quiere mostrar. “Si no se filmó, no existió” es el postulado con el que el realizador documenta esta época saturada de información, pero con muchos ojos mirando hacia otro lado. Rodrigo Piedra
Dir: José Celestino Campusano
Para volver a ver: Lunes 24, 15hs, Village Recoleta 8 – Martes 25, 22.45hs, Village Recoleta 8
Corralón
Sección: Noches especiales – Corralón cuenta una historia de obsesión, la obsesión del fondo y de la forma. Teñido de un apagado blanco y negro, un camión recorre la ciudad con cargas de cemento. Un camión de carga que cada vez va a ir cargando más cosas, empieza guardando cada ladrido de perro para seguir con unos secretos que no pueden salir a la luz y para eso está el cemento, para sellar los misterios de la subjetividad y también de lo que falta. Personajes duros acompañan la realidad, personajes disconformes, con sus trabajos, con su situación social, con el otro individual. El conflicto entre clases sociales intolerantes la una a la otra, cuando una quiere dominar es cuando sale la animalidad que le permite a un hombre primero mostrar los colmillos y más tarde ladrar. La mordida queda en suspenso.
Una historia de obsesión porque se arma un corralón, parte por parte, de a poco y en crecimiento para que el montaje sirva como herramienta narrativa. Las pistas te la va dando la calle y no los personajes, el afuera, la película se obsesiona con una idea y pone como estandarte la persecución de elementos que, aislados de los personajes, nos siguen narrando su cabeza. Como si el afuera también sería el adentro. El entorno ayuda a describir la psicología del personaje, que prefiere estar gran tiempo callado, pensando, fumando, armando un plan y mientras tanto ladran los perros en la calle.
La construcción de la historia está también impregnada a la idea obsesiva, como si cada detalle puede colaborar con lo que se está haciendo, no hace falta que los personajes miren ya que la película está siempre atenta a seguir el camino. Si el camión pierde el rumbo no importa, la idea ya está con cemento. Lo que sigue es seguir construyendo, algo que vaya creciendo, aumentando cada vez algo que tiene que reventar de alguna manera por acumulación. La obsesión, la locura, la oposición. Juampa Barbero
Dir: Eduardo Pinto
Para volver a ver: Lunes 24, 14.30hs, Village Recoleta 4