Stanley Kubrick era un gran perfeccionista de la imagen. Con ver algunas de sus películas podemos apreciar su obsesión por la simetría y la técnica, primeras características en las que pensamos al hablar de su cine.
Sin embargo, el director de La naranja mecánica no se mostraba muy receptivo a las críticas negativas. Al conflicto con Stephen King por El resplandor se suma que en los 70 intentó que no se publicara un libro que incluía críticas malas sobre su obra.
Hablamos de The Magic Eye: The Cinema of Stanley Kubrick de Neil Hornick, un libro que repasaba la obra cinematográfica del director. Aunque en general tenía una visión positiva, incluía algunos aspectos negativos.
Qué le molestó
En un comienzo Kubrick dio el visto bueno a este proyecto y cooperó, pero luego se opuso llevando el asunto a instancias legales. 55 años después, este libro fue finalmente publicado de la mano de Sticking Place Books.
Sobre el libro, el propio escritor explica que se trataba de “un resumen de buenas cosas sobre cada película seguido de un resumen de puntos malos que, según la visión de Kubrick, siempre superan a los buenos por la forma demasiado enfática en que tales críticas son presentadas”, (vía The Guardian).
Uno de los ejemplos de las “críticas negativas” se refiere a Lolita, el film de 1962 basado en la novela homónima de Vladimir Nabokov: “Hay buenas cosas en Lolita. Pero, en muchos aspectos desperdicia, empobrece y convencionaliza su material original, quitándole su complejidad, ninfetería y erotismo”.
Por su parte, el editor Paul Cronin expresó: “Kubrick no se limitó a editar: borró todo el proyecto. Ahora, casi 55 años después de que Neil Hornick lo completara, los lectores finalmente pueden hacer sus propios juicios sobre el libro que Kubrick estaba tan implacablemente decidido a mantener fuera del ojo público”.