Este 15 de diciembre llega a Netflix Fue la mano de Dios, la nueva película del consagrado director italiano, Paolo Sorrentino. El responsable de películas como La gran belleza y Youth ahora apuntó a un código más íntimo y autorreferencial para retratar su Nápoles natal durante los 80.
Ya es sabido que el realizador es un gran fanático de Diego Maradona, de hecho incluyó un personaje alegórico al futbolista en Youth. En un hotel de lujo de los Alpes italianos, descansa un hombre robusto, zurdo, que hace jueguitos con una pelota y que la gente se amontona para pedirle autógrafos. En su nueva película, Sorrentino muestra cómo Diego es parte de su vida, su primera juventud y su formación.
La sinopsis oficial de la cinta indica:
“Una historia ambientada en la tumultuosa Nápoles de los ochenta. Fue la mano de Dios está repleta de alegrías inesperadas —como la llegada de Diego Maradona— y una tragedia igual de imprevista. El destino juega su propio papel, la alegría y la tragedia se entrelazan, y el futuro de un niño, Fabietto Schisa, se pone en marcha. Sorrentino regresa a la ciudad que lo vio nacer para contar su historia más personal, una sobre el destino y la familia, el deporte y el cine, el amor y la pérdida”.
Fue la mano de Dios es la sucesora de Loro, película de 2018 en la que Sorrentino retrató de manera personal a Silvio Berlusconi, haciendo una crítica al poder y revisando una de las figuras clave de las últimas décadas para Italia.
Este estreno es sin dudas una joya para que Netflix capte a un público más cinéfilo, dado que también tendrá el lanzamiento oficial de Madres paralelas, la nueva película de Pedro Almodóvar.