Este 18 de marzo llega a Netflix la película Ilusiones mortales (Deadly Illusions), un thriller psicológico con altos grados de erotismo que tiene como protagonistas a dos mujeres: Mary, una escritora de bestsellers que se encuentra en pleno bloqueo creativo, y Grace, la niñera que acaba de contratar para que se ocupe de los niños y los quehaceres de la casa mientras ella puede dedicarse a la escritura.
La cinta, de casi dos horas de duración, anticipa desde su impactante tráiler mucha acción y provocativas imágenes. La sinopsis oficial de Netflix dice lo siguiente: “Una exitosa novelista que sufre un bloqueo creativo contrata a una inocente niñera para sus hijos. Pero, a medida que escribe, ficción y realidad empiezan a confundirse”.
Dirigido por Anna Elizabeth James, quien también ha dejado su firma en películas como Pistachio (2018), 7 From Etheria (2017) y Emma’s Chance (2016), este nuevo film plantea una extraña relación entre la escritora y la niñera, signada por el erotismo, las visiones y una posible amenaza. Como en los thrillers clásicos, todo parece ir bien al principio, hasta que sucesos extraños empiezan a tener lugar en el hogar a raíz de la recién contratada.
El recurso de una extraña que llega a la casa y tiene toda la confianza de sus empleadores se vincula con películas como La profecía y la recientemente premiada Parasite. Sin embargo, lo novedoso que podría otorgar Ilusiones mortales es el condimento erótico que se desenvolverá mayormente entre las dos mujeres.
La película cuenta con las actuaciones de Kristin Davis, Dermot Mulroney y Greer Grammer -entre otros- pero, como muchas películas de Netflix, termina ofreciendo mucho menos de lo que propone en su premisa. También es clara la tendencia de destacar papeles protagónicos femeninos, algo que se vio con mucha fuerza en una de las apuestas más ambiciosas de la plataforma: Descuida, yo te cuido.
Ilusiones mortales ofrece escenas de gran tensión, incluso pasajes de alta violencia, una trama atravesada por lo sexual e incluso un permanente juego entre la ilusión y lo real que en muchos casos no llega a delimitarse con exactitud. Aún así, parece no contentar a su público. De hecho, desde Los Angeles Times catalogan al final de esta cinta como un embrollo inexplicable, que termina haciendo agua desde varios aspectos narrativos.