Todas las actrices y actores de renombre comenzaron desde el fondo y fueron escalando a base de talento y esfuerzo, pero aunque el camino es prolongado siempre hay un punto de inflexión en ese viaje. En el caso de Olivia Colman, ese viraje en su carrera se dio en una película de 2011. Según recuerda Far Out Magazine, la aclamada intérprete británica, que ya venía de una familia ligada al arte dado que su madre era bailarina de ballet, comenzó a enamorarse de la actuación en sus años escolares, cuando le tocó participar de la producción The Prime of Miss Jean Brodie.
Con el correr del tiempo, Colman se metió más de lleno en la actuación y decidió estudiar teatro en la Universidad de Cambridge, donde pulió su talento y adquirió los recursos que luego utilizó para hacerse con un papel en el show de la BBC, Bruise, en el 2000, mismo año en el que también formó parte del elenco de Long Day’s Journey Into Night, obra en la que interpretó a Cathleen. Desde aquel momento, el resto es historia: Colman se convirtió en una de las máximas referentes inglesas de la actuación y, hasta el momento, se hizo con un Oscar, un British Academy Film Award, un Primetime Emmy, tres British Academy Television Awards y tres Golden Globe.
En una entrevista con The Talks, la nacida en Norwich fue consultada por ese “punto de inflexión” en su carrera que la llevó a ser quien es hoy en día, pero en esa oportunidad la respuesta no parecía ser tan clara. “¡En realidad no sé si hubo uno!”, dijo. “Creo que solo ha sido una combustión lenta y prolongada. Trabajé de manera bastante consistente y estoy muy agradecida, incluso por los años en los que no conseguí tantos trabajos de actuación, porque eso significa que ahora realmente aprecio poder hacer lo que amo”.
Sin embargo, en otra entrevista Colman apuntó a la cinta Tyrannosaur de 2011 como la producción que marcó un antes y un después en su carrera profesional. “Había una película llamada Tyrannosaur, y creo que a partir de ese momento me ofrecieron cosas diferentes. También, para mí, desde el punto de vista de la valentía, después de ese film tenía tanto miedo de hacerlo mal…”.
Además, durante la misma conversación, Colman se encargó de señalar la importancia del papel de Hannah que desempeñó en el largometraje escrito y dirigido por Paddy Considine. “Ese personaje era una sobreviviente de abuso doméstico y pensé que si alguien que miraba había experimentado eso, no quería que pensaran algo como: ‘No es así [como se vive el abuso]’. Quería hacerlo bien. Y las cosas probablemente cambiaron después de eso”.