Harry Potter es una de las sagas del séptimo arte más celebradas de la historia. No solo por sus efectos visuales sino por la calidad de las actuaciones y la trama. Sin dudas, la producción de esas cintas cambió por completo la vida de sus protagonistas.
Por ejemplo, hace poco Daniel Radcliffe (quien encarna a Harry) confesó que no ha podido ir a ver la obra de teatro que sirve de secuela a la séptima película. Sus motivos tienen que ver con sentirse bastante intimidado. No quiere que todos los ojos se posen sobre él y sus reacciones al ver esa puesta en escena; entonces se abstiene de ir.
Algo similar parece sucederle a Rupert Grint, el encargado de interpretar a Ron Weasley. El colorado que hoy tiene 30 años retomó su carrera actoral hace poco. Lo hizo con un papel importante en las series Sick Note y The ABC Murders. En una entrevista concedida a RadioTimes, el británico confesó lo siguiente al recordar su participación en Harry Potter:
“Fue un momento extraño y me ha costado bastante procesarlo. El simple hecho de ser invisible todavía puede resultar difícil. A veces solo queres ir a una barbacoa”.
Con ello deja en evidencia su incomodidad con la popularidad puesto que es una persona en esencia reservada. Después complementó lo anterior al apuntar:
“Lucho por recordar la vida antes de ello. Pienso que me perdí un poco en ese camino. Con la fama, casi que sos el personaje incluso cuando no estás en el rol”.
Aquellos sentimientos encontrados no le permiten disfrutar de la mayoría de las entregas de la citada saga, sobre todo las más recientes:
“Vi Harry Potter y la piedra filosofal hace poco, por primera vez desde el estreno, y en verdad disfruté mirando hacia atrás”.
En ese sentido, se le hace más sencillo porque ha transcurrido más tiempo desde la filmación de esas obras. En cambio, con últimas películas le resulta casi imposible:
“Las más recientes definitivamente no puedo verlas. Quizá podría mirar hasta Harry Potter y el Prisionero de Azkaban”.
Cualquiera esperaría que el citado artista tuviese una actitud más positiva frente a ese material, pero cada quien vive los alcances de su legado de una manera distinta.