Kate Winslet ha desarrollado incontables roles icónicos en Hollywood y en la televisión: desde el más reciente en la serie de HBO Mare of Easttown hasta el de El lector, papel que le otorgó el premio Oscar a la Mejor actriz. Sin embargo, su figura siempre está relacionada con el primer gran éxito de su carrera: Titanic.
La actriz interpretó a Rose, una chica de la alta sociedad que se enamora del rebelde Jack, un joven que viaja en la parte más económica del barco pero que representa la libertad total para ella. La pareja se constituyó como un auténtico ícono romántico y pop de los noventa, a pesar de que tanto Winslet como Leonardo Di Caprio estaban en los comienzos de sus carreras y con el tiempo lograrían papeles mucho más complejos y desafiantes. Así es que, muchos años después de haber encarnado a Rose, Winslet se rehúsa a ver Titanic, ya que no puede soportar su actuación.
Fue en una entrevista con CNN (vía Far Out) que la actriz confesó que haría muchas cosas diferentes si hoy debiera interpretar a la joven que se siente sapo de otro pozo en su clase social. Así, reveló que cuando ha vuelto a ver la película su reacción ha sido: “¿De verdad, en serio? ¿Hiciste eso? Dios, es horrible. Afortunadamente, he mejorado mucho ahora. Suena terriblemente autoindulgente, pero los actores tendemos a ser muy autocríticos. La paso mal viendo cualquiera de mis actuaciones, pero mirando Titanic yo estaba como ‘Oh dios, quiero hacerlo de nuevo”.
Lo cierto es que la actriz de El descanso tuvo que esforzarse mucho para conseguir el papel de Rose, ya que James Cameron no estaba segura de contratarla. Poco tiempo después del estreno habló en Access Hollywood y reveló por qué este personaje la atrajo desde el momento en que se enfrentó al guion: “Su fuerza, su caracter, su determinación, su pasión interior: son cosas con las que yo me relaciono. Creo que es algo que tengo en mí. Soy una persona del afuera, una chica que disfruta del viento soplando en su pelo, y mi familia también, por eso creo que realmente era para mí”.