Martin Scorsese tiene una filmografía envidiable. Mean Streets, Taxi Driver, Raging Bull, The Wolf of Wall Street y Gangs of New York son tan solo algunas de las cintas en las que el neoyorquino trabajó desde 1967, año en el que debutó detrás de cámara con Who’s That Knocking at My Door. A pesar de ser uno de los directores más exitosos y aclamados de la historia del séptimo arte, Scorsese cuenta con una película que él mismo considera que “no se debería haber hecho”.
En 1982, el director estrenó The King of Comedy, un largometraje protagonizado por Robert De Niro y Jerry Lewis. La sinopsis del film reza: “Rupert Pupkin es un cómico obsesionado con la fama y con convertirse en el mejor en su campo. Un día Rupert conoce a su ídolo, Jerry Langford, y le suplica la oportunidad de aparecer en su show, pero éste se la niega. Sin embargo, Pupkin no cede y acosa a Jerry para conseguir sus propósitos. Con la ayuda de su amiga Masha, usa un método contundente para poder obtener sus minutos de celebridad”.
Scorsese escribió la película poco tiempo después de haber terminado sus deberes para Raging Bull, con la huelga de escritores de 1981 a la vuelta de la esquina y sin haberse recuperado del todo de un grave caso de neumonía. En Scorsese on Scorsese, su libro autobiográfico de 1989, el cineasta contó: “Decidimos hacer The King of Comedy y se avecinaba una inminente huelga. Físicamente, no me sentía preparado. No debería haberlo hecho y pronto quedó claro que no estaba a la altura. En la segunda semana de rodaje les rogaba que no me dejaran continuar“.
Al referirse a su tiempo en el set de grabación, Scorsese dijo: “En esta etapa estábamos filmando todos los días de 4 a 7 pm, durante tres horas intensivas. Toda la película tardó 20 semanas en rodarse. El director siempre marca el ritmo y tal vez un camarógrafo más rápido me hubiera ayudado a avanzar. Pero no lo hice, así que lo que salió mal es realmente toda mi responsabilidad. Pero no siento que nada haya salido mal delante de la cámara. […] Los ensayos fueron buenos, Jerry Lewis estuvo genial y todos los demás lo hicieron fantástico. Pero fue una cinta muy extraña”, sentenció.