La provocativa carrera del director Lars von Trier ha dado como resultado que, por alguna u otra razón, el cineasta danés sea criticado. Sin embargo, en algunas oportunidades el también actor ha abierto tanto su corazón como su mente al público para dar a conocer sus gustos y preferencias. Según recuerda Far Out Magazine, en una conversación con The Independent sobre sus films favoritos, el director manifestó su amor por Stanley Kubrick y definió a su cinta de 1975, Barry Lyndon, como “un placer, como comer una muy buena sopa”.
“Es muy estilizado y luego de repente viene algo de emoción [cuando el niño se cae del caballo]. No hay mucha emoción. Hay muchos estados de ánimo y algunas fotografías fantásticas, realmente como estas pinturas antiguas”, comentó. Continuando con su elogio hacia el largometraje, von Trier agregó: “Lo bueno es que Kubrick siempre establece sus estándares. Barry Lyndon para mí es una obra maestra“.
Finalmente, von Trier contó cómo su filmografía fue influenciada por la leyenda del séptimo arte estadounidense. “La narración en mis cintas Manderlay y Dogville definitivamente está inspirada en Barry Lyndon, y la narración ahí es esta voz irónica, todo este tema del capítulo, la sensación de que hay capítulos. Lo hice en Dogville y Manderlay y, hasta cierto punto, en Breaking the Waves. ¡Todo es Kubrick!”, cerró.