Ricardo Darín es uno de los actores más reconocidos del cine de habla hispana. Si bien el protagonista de El Eternauta no ha mostrado devoción por el mundo de Hollywood y su farándula -incluso en una oportunidad reveló que los Oscar no representaban un interés para él- sí tiene anécdotas con grandes estrellas de esa industria. En diálogo con Migue Granados, habló de los encuentros que tuvo en el pasado con figuras de Hollywood.
“Brad Pitt en los premios Golden Globes me estuvo boludeando. Él estaba sentado en primera fila, era tarde y se ve que había escabiado un poco. Y me estaba boludeando todo el tiempo y yo estuve lerdo, porque le tendría que haber dicho ‘vení, vení, subí’ y teníamos la foto con Brad Pitt. Pero no lo hice. Es muy simpático”, relató. Sin embargo, no todos le cayeron bien. “Son todos muy simpáticos, salvo uno. Ehhh, Ben Stiller. ¿Yo lo dije?“.
La respuesta sorprendió, no solo porque Stiller es conocido por su carisma y su humor, sino también porque es amigo del tenista argentino Diego Schwartzman, lo cual podría haberlo unido a Darín. “Sí, es que por eso yo fui y entré como un caballo. Le dije: ‘Ehh, una foto así se la mandamos a Diego, que es amigo’. Y me dijo: ‘See, se (mientras hacía una mirada despectiva). Y saqué la foto, pero no se la mandé porque la vi y el tipo estaba con una cara de orto infernal y yo estaba todo sonriente”, agregó.
Darín recibió elogios de Quentin Tarantino
Años atrás, Darín reveló que declinó la oferta de ser parte de Hombre en llamas -el film de 2004 protagonizado por Denzel Washington- por los estereotipos que planteaba en torno a los latinos. Sin embargo, no sabemos qué hubiera dicho si Quentin Tarantino le hubiera hecho una oferta laboral.
En una entrevista con Pilar Smith, el director de Perros de la calle destacó el talento de Darín y reveló que le encantaría trabajar con él: "Uno de mis actores favoritos de habla hispana es Ricardo Darín. Creo que es tremendo. Pienso que es el Al Pacino de Argentina". Más adelante, Quentin recordó con entusiasmo la vez que le entregó el Oscar a Mejor película extranjera por El secreto de sus ojos.