Con el correr de los años, el nombre de Tom Hardy ha ido ganando reconocimiento en Hollywood, llegando a ser lo que es hoy en día, pero para algunas personas que se cruzaron con él en sus comienzos actorales, el éxito del inglés no es ninguna novedad.
Uno de esos visionarios fue Ed Blum, el director de la cinta Scenes of a Sexual Nature en la que Hardy interpretó a Noel y compartió tiempo con Adrian Lester, Ewan McGregor y Andrew Lincoln, entre otros colegas.
En un diálogo con NME, el cineasta recordó la audición de Tom, la cual lo impresionó tanto que lo llevó a tomar la decisión de solicitar los servicios de Hardy después de menos de un minuto de haber comenzado.
“Habíamos llegado a un punto en el casting en el que teníamos a todos estos personajes famosos y nos estábamos completando. Era mi primera película y, debido a eso, tomamos la decisión de que íbamos a intentar mantener abiertos dos papeles para actores relativamente desconocidos. Uno de ellos [era] obviamente Tom Hardy”.
“Tom fue solo uno de los dos que tuvieron que hacer una audición en ese momento… estaba buscando avanzar – creo que fue solo una semana, 10 días antes de que estuviéramos filmando – y [la directora de casting] Emma Style, quien desafortunadamente falleció – dijo: ‘Ed, tenés que esperar, tenés que esperar para ver a este joven actor. Va a ser una estrella y es brillante”, agregó.
Luego, el mandamás del film contó lo rápido que lo cautivaron los dotes del nacido en Londres y su pensamiento sobre él tras verlo en acción. “Creo que en 30 a 40 segundos simplemente dije: ‘Wow. Uno, tiene el papel, y dos, la directora de casting tiene razón: va a ser una superestrella’. Estuvo absolutamente fenomenal en la audición. Tomó decisiones realmente valientes, decisiones realmente inteligentes y fue una obviedad. De hecho, di por finalizado el día en ese momento [porque] había encontrado a la persona que quería que interpretara ese papel”, rememoró.
Entrando un poco más en detalles sobre lo que el nominado al Oscar tuvo que hacer en aquella oportunidad, Blum contó:
“Tenía que leer el guion, el personaje, por lo que no hubo ninguna improvisación ni nada de eso, fue solo una lectura directa. Realmente había hecho su tarea. Había creado un personaje en su mente”.
“Llegó a la audición y tomó algunas decisiones realmente valientes… como todos los grandes actores, realmente le había dado al personaje mucha más vida, incluso en la audición. Solo los pequeños matices, las vulnerabilidades, el descaro y, de la nada, el personaje cobró vida. También era muy afable y bastante vulnerable. Simplemente la rompió. También hay algo en una prueba en la que a veces te olvidás que estás audicionando y estás escuchando a un personaje en una película o una obra de teatro y eso es exactamente lo que sucedió. Me llevó a un lugar diferente. Estaba pensando en el personaje y olvidé que un actor estaba haciendo una audición porque era muy bueno. Todas las decisiones que tomó en ese momento fueron el personaje que está en pantalla”, cerró.