A mediados de este año, los fanáticos de Spider-Man tuvieron algunas semanas un tanto difíciles cuando se dio a conocer que Disney y Sony habían fallado en sus negociaciones para renovar el acuerdo que le permitía al héroe ser parte del Universo Cinematográfico de Marvel.
Como ya sabemos, tiempo después ambas partes pudieron solucionar el asunto y se anunció que el Spidey de Tom Holland seguiría siendo parte del colosal proyecto de la compañía de Mickey Mouse.
Sin lugar a dudas, las semanas entre una noticia y la otra no solo afectaron a los amantes del trepamuros, sino también al propio Holland, quien en una entrevista brindada en el programa de Jimmy Kimmel reconoció haber tenido una conversación telefónica con Bob Iger, el CEO de Disney, estando borracho.
“Estábamos en la D23. Las noticias salieron y obviamente yo estaba devastado. Fue horrible”, empezó relatando el inglés. Luego prosiguió:
“Recuerdo que pedí el correo de Bob Iger porque le quería dar las gracias y decirle que habían sido los mejores cinco años de mi vida, gracias por cambiar mi vida de gran manera y que esperaba que pudiéramos trabajar juntos en el futuro. Me dieron su correo electrónico, le envié un e-mail y muy rápido me respondió diciendo que quería llamarme y me consultó cuándo estaba libre. Pasaron dos o tres días y mi familia yo estábamos en un pub en nuestra ciudad. Estábamos jugando y yo ya llevaba tres cervezas, no comí mucho y recibí una llamada de un número desconocido. Tuve el presentimiento como ‘creo que este es Bob Iger, pero estoy ebrio’.”
Además, el joven actor confirmó los dichos del propio empresario quien hace unas semanas había asistido al show de Kimmel y dio a conocer que durante su llamada Holland éste lloró porque quería que el presidente de la compañía lograra un trato con Sony.
Finalmente, Tom se salió con la suya y los estudios arreglaron una tercera entrega de Spider-Man en solitario y seguir compartir la custodia del superhéroe.