El padrino es una de las trilogías más celebradas de la historia del cine. Dirigida por Francis Ford Coppola, marcó un hito en el cine de gángsters y también abrió la carrera de Al Pacino al mundo, así como reavivó la de Marlon Brando al otorgarle un papel ovacionado por la crítica y que lo corrió de su talante de galán de Hollywood.
Así, las tres películas que componen la saga fueron un verdadero éxito tanto por la opinión de la crítica como por sus triunfos en las premiaciones. Si bien en el imaginario popular la segunda parte es considerada la mejor de las tres, lo cierto es que esta trilogía no tiene fisuras y, a medida que pasa el tiempo, más reafirma su lugar intocable en la historia del cine.
Un hito en los premios de la Academia
Uno de los hitos que marcó la saga de Coppola basada en la obra literaria de Mario Puzo fue lograr ser la única trilogía del cine en ser nominada a Mejor película en los premios Oscar.
La primera entrega, que fue estrenada en 1972, recibió 11 nominaciones a los premios de la Academia, aunque solo se llevó tres, entre los que se cuenta el galardón a Mejor película. Luego, El padrino II (1974), también se alzó con sendas nominaciones y se convirtió en la primera secuela en haber ganado el premio a Mejor película, además de llevarse el de Mejor director, Mejor guion adaptado y más.
Finalmente, la tercera entrega de El padrino que fue lanzada en 1990 también fue nominada a Mejor película, pero no llegó a romper el récord, ya que perdió ante Danza con lobos. De hecho, de todas las nominaciones que recibió no logró ganar ninguna, por lo que es considerada la entrega menos loable de la trilogía.