El Hombre Puede y Ases Falsos también. Dos años después de su último lanzamiento, los chilenos regresan con un disco con muchos más matices y lo mismo cargado de un montón de frases duras que apuntan a la cabeza e incomodan a más de uno con nostálgicas historias de desamor y añoranza.
Grabado por Kily González y producido por Martín del Real, El Hombre Puede salió a la luz bajo el famoso sello Quemasucabeza. “Chakras” es el tema encargado de marcar el regreso de Cristóbal Briceño y compañía. Pegajoso en cuanto a melodía y letra, es una de las canciones mejor logradas de las diez que componen el álbum.
Después viene “Gehena” y su discurso crudo y directo, siempre ascendente. Le sigue “Sal de ahí” con esa guitarra que se queda pegada a la cabeza y que transporta a alguna playita andina. Más rockera empieza “Subyugado”, con el discurso revolucionario y combativo del disco acentuado aquí.
Bajo la misma línea continua “Más se fortalece”, con la crítica más aguda y menos disfrazada de todo el disco. Todo lo que hacés sólo fortalece al decadente sistema que nos está consumiendo. Así de triste es la vida.
Si bien el disco se encuentra lleno de esa nostalgia inherente a la música chilena contemporánea, se encuentra marcada con dos tonos distintos, pues mientras la primera mitad del disco luce crítica y rebelde, líricamente hablando, el resto transcurre entre historias de amor y desamor.
Y ese quiebre inicia con “Fría”, algo diferente a lo que nos tenían acostumbrados. Con una intro melancólica que se convierte en una melodía más sencilla y una letra desgarradora capaz de derretir el corazón más congelado, no hay duda, llegó el momento de derramar la lágrima.
“Mucho más mío” mantiene el mood de dolorosa resignación y “Antes sí ahora no” habla sobre eso a lo que ninguna relación de pareja puede escapar y que no es otra cosa que el inminente final.
“Creo que no”, con sus guitarras juguetonas y pegajosa melodía y “Trato hecho”, mucho más pegadora con añoranza de los días de infancia, cierran un disco que deja buenas sensaciones pero que cuesta ver como algo homogéneo. Quizá sea cuestión de seguirle dando play hasta que las canciones se nos vuelvan tan familiares como todo lo hecho por los chilenos. Mientras tanto, estamos seguros de que hay potencial para sacar más de un himno de por aquí.
Ases Falsos – El hombre puede
2016 – Quemasucabeza
01. Chakras
02. Gehena
03. Sal de ahí
04. Subyugado
05. Más se fortalece
06. Fría
07. Mucho más mío
08. Antes sí ahora no
09. Creo que no creo
10. Trato hecho