En el barrio de Boedo está la sala de Bestia Bebé. Es la planta baja de la casa de toda la vida de Tom Quintans, guitarra y voz de la banda. El lugar está decorado con pósters de distintas fechas, en solitario y en conjunto con otras bandas. En la sala de la consola un cuadro enorme de John McClane, famoso personaje de Duro de Matar interpretado por Bruce Willis y uno de Donovan vigilan el lugar. “La sala la compartimos con mi hermano, así que todo es bastante democrático”, explica en relación a todos los afiches que hay. Al lado de la puerta hay un recorte de una foto de AC/DC, un banderín de Racing, y dibujos varios. Hay muchas cajas dando vueltas, una torre de pizza de discos, bibliografía rockera y cosas de sala de ensayo: instrumentos, cables, aparatos de todo tipo.
Ahí, en un sillón bajo pero que se ve extremadamente cómodo, Tom se señala la cabeza, un poco en joda, un poco en serio, para explicar dónde nace Bestia Bebé.
Empecé yo con canciones mías que había compuesto con la guitarra. Tenía muchas ganas de tocar y cantar. Me gusta más que tocar la batería. Quise armar la banda porque no quería tocar solista y convoqué a los muchachos. Es divertido y eso es lo más importante. Es un trabajo, pero es el mejor trabajo del mundo. Por lo menos es lo que queríamos hacer. Creo que si trabajás de lo que te gusta, entonces está bien.
¿Alcanza para vivir?
No, ni en pedo. Este es uno de nuestros trabajos. Todos hacemos otras cosas. Yo por ahí estoy más con la música: toco en otros proyectos, tengo la sala con mi hermano, pero el resto tiene laburos de otras cosas. Chicho, el bajista, maneja un flete, el Polaco y Topo laburan en programación y cosas de internet. Y nos la rebuscamos.
¿Pensás que en algún momento van a poder vivir de la música?
No sé. Uno no lo hace para vivir de esto, pero mientras más te metes más tiempo te lleva y por lo tanto menos tiempo para hacer cosas que no tengan que ver con la música tenés. Una cosa va de la mano con la otra. Pero también es muy difícil. Hay que pagar un montón de cosas para vivir y a veces tocando con una banda no alcanza. Entonces habría que llevar más gente, vender más discos, y ahí sí cierra todo.
¿Cómo es trabajar en Laptra?
Nunca estuve en otro sello, pero me gusta. Hasta ahora todo salió bien. Esta bueno porque es un sello diferente, con sus cosas buenas y cosas malas, como todo. Pero es un sello que lo manejamos nosotros mismos, las bandas. No hay un dueño que decide por todos. Más que un sello es como una comunidad. Yo soy de los que más está metido ahí laburando, no porque alguien me puso ahí, sino por el hecho de trabajar, de hacer cosas. Y me gusta comprometerme.
¿Se conocen entre todos?
Si, más que nada porque es como un grupo de amigos. Se formó así el sello. Y siempre se mantuvo eso. Mucho amiguismo. Las bandas que suelen entrar son amigos, mucha onda, mucha amistad. Si no es raro que en Laptra haya una banda que no tenga nada que ver en lo humano. Es una parte importante, por esto que te digo de que todos lo llevan adelante.
¿Todos los que entran son conocidos, entonces?
Los escuchas y además los conocés. Es mas así. Y se bancan todas las cosas malas que tenemos y aceptan las reglas de juego de Laptra, que tal vez muchos dicen que se la bancan pero en realidad no. El hecho de no tener a nadie que labure 100% para el sello y que todos hagamos todo.
¿De dónde viene la estética de la banda y las letras?
Viene de cosas que me gustan. Gustos personales. Y fue lo mejor que se me ocurrió para cada tapa. Nos gustaba que cada disco tuviera una personalidad, algo que los hiciera fáciles de identificar.
¿Y las letras?
Es lo que sale. No está muy meditado. Tengo la música y después le tengo que poner letra. Por ahí parto de alguna frase que me gusta o cosas así. O digo “estaría bueno hablar de esto” y ya. No me considero un re letrista. Escribo letras para poder acompañar una música. Casi todas las letras son sobre vivencias personales. Después hay cosas como luchador de Boedo, que son historias en tercera persona y nada que ver, pero el resto son todas cosas que veo.
¿Cómo preparan el show del jueves?
Somos muy de ir y tocar nuestros temas. Siempre. No somos de ponernos a pensar cosas especiales, ni invitados. Dejamos que eso surja más en el momento. Más natural. Todavía no armamos la lista.
¿Improvisan?
Nunca, jamás. No nos ponemos a zapar. Todo está ensayado. A veces hacemos una lista de 15 temas y por ahí da hacer uno más, pero en general está todo medido. Siempre hay algo pensado por si piden una más.
¿Están armando música nueva?
Ahora estamos armando unas maquetas con música nueva. Van a hacer lados b y rarezas, temas viejos que nunca grabamos y lados b de Jungla de metal 2. Y el plan es sacarlo a principios del año que viene. Yo igual tengo canciones nuevas, pero todavía está ahí. Más adelante nos pondremos a trabajar en eso nuevo.
¿Qué cosas son esenciales para Bestia?
Hacer buenas canciones. Si vos tenés buenas canciones, podés hacer lo que quieras. Toqués como la toqués, va a seguir siendo buena.
Para poder lograr estas cosas tenés que meterte de lleno. Por cómo es Argentina, también. Que viene un loco y te hace un contrato por 8 discos. Acá es todo a pulmón. Nada te asegura nada. O te dedicás de lleno y laburás o dejás esto. Desde chico lo entendí. Por eso dejé la secundaria. Aprendí mucho viendo a El Mató, ayudándolos. Es todo un aprendizaje de años. Cuando arranqué con Bestia ya llevaba 6 años en el circuito, armando fechas y cosas así. No es que de repente me cayó esto.
¿Tuvieron malas experiencias?
No. Todo salió bastante bien. Tenés que poner todo en la balanza. Fueron muchas más las cosas buenas que las malas. Un poco de suerte, un poco de laburo. Vos tenés que hacer todo lo posible. Tenés que estar en el lugar correcto, porque si no, no va a aparecer la oportunidad. ¿Cómo hicimos para tocar en Lollapalooza? Tocamos 300 veces antes. Yo sé que no es 2+2, pero está eso. Tenés que moverte. Te llaman cuando te movés. En tu casa sentado no vas a llegar a nada. Y no bajar los brazos. Que no te desaliente tocar para dos personas. Las bandas son así. Lo más importante es estar contento con lo que estás haciendo.