Está a punto de empezar noviembre, un mes fuerte para la agenda internacional en Buenos Aires. Uno de los shows más esperados es el del canadiense, ahora con base en Brooklyn, Mac DeMarco, que agotó con varias semanas de anticipación su show en Groove. En plena actividad creativa, en este tiempo publicó Another One, un disco más relajado que los anteriores, mientras que sigue alimentando ese personaje que construyó.
Antes de su visita, hablamos con él desde su casa en Nueva York. Comenzó con una voz de dormido, entre sorbos de lo que podría ser café, té o agua; no tardó en despertarse y nos contó memorables anécdotas que nos ayudan a deconstruir ese divertido personaje que él tiene muy en claro, además de sus planes, sus métodos de composición, Los Simpsons (en esta pregunta recurre a la memoria de Kiki, su novia de siempre, que está rondando por la casa) y Limp Bizkit.
Esta va a ser tu segunda visita a Argentina, ¿qué recordás de la primera y qué esperás encontrar ahora?
Recuerdo que los productores nos dieron mucha carne. Habíamos llegado un día antes de tocar y fue cómo ‘qué locura, toda esta carne!’ Y estábamos tan llenos pero el apetito no se iba, era como carne de verdad y por dios… deliciosa. Bueno, en Argentina abundan los lugares de bifes, ¿no?
Bueno, sí, somos bastante famosos por eso.
Tienen por qué. Bueno, del show recuerdo que el lugar donde tocamos era probablemente más grande de cualquier lugar en el que tocamos en Estados Unidos, o casi del mismo tamaño de cuando tocamos en Nueva York, lo que me parecía bastante loco porque nunca habíamos ido. Y después, los fans estaban taaan locos, la gente saltaba y se movía mucho. Muy loco.
Claro, es que acá tenés una gran cantidad de seguidores.
Sí, ¡por eso volvemos!
Volviendo a tus inicios, después de que te mudaste de Canadá a Brooklyn, ¿pensás que llega un punto en la carrera de una banda nueva en la que es necesario mudarse allí?
Mmm, no lo creo. Ya no vivo en Brooklyn pero yo personalmente como que me dejé llevar y fue más bien suerte, tengo muchos amigos en Nueva York y es donde tengo la mayoría de mi trabajo: mi sello, mi manager, todos están acá… así que en algún sentido sí me fue necesario. Nueva York es genial y todo el mundo quiere vivir acá y creo que se le hace la vida más fácil a los músicos. Todo viene hacia vos, en un sentido, pero no sé. Con internet, ahora no importa realmente dónde vivís si sos músico. Probablemente no esté acá por mucho más tiempo, probablemente vuelva a mudarme.
Hablando de tu sello Captured Tracks, ¿creés que cambió la relación que tenías con ellos a partir de tu éxito?
Siempre han sido muy amigos míos. Empezamos puramente por los negocios, firmando contratos y esas cosas, pero me encanta la gente que lleva adelante el sello. Son muy generosos conmigo y nos llevamos muy bien. Lo único es que con todo lo que estoy girando ahora nos vemos menos que antes, pero dentro de todo es bastante parecido a los inicios.
¿Cómo reaccionó la gente a tu invitación para ir a tomar un café a tu casa? ¿Siguen yendo?
Siguen viniendo, sí, y recibo mucho correo también. Pero como saben que me voy de gira por unos meses, no están viniendo tanto y además como ya no es verano, nadie viene para mi barrio. Vivo en un barrio playero y estamos en otoño, así que ya hace frío como para que vengan.
¿Y nunca pensaste que era un poco peligroso decir tu dirección?
No, peligroso no. No pensé en esos términos sino más bien en que en algún momento podría estar muy ocupado y temía que llegaran de a cientos. Pensé que podría ser muy cansador pero no estaba preocupado por ningún peligro. Como mucho vendrían a pegarme porque no les gustó el disco, pero confío en los chicos que me escuchan.
Hablando de tu último disco, ¿qué pensás de la gente que dice que este disco es más “maduro” que los anteriores? ¿Te sentís distinto a los discos previos?
Sí, definitvamente. Todo el mundo me dijo que es muy distinto a los otros, pero qué se yo. Para mí, cada disco es diferente. O sea, lo hice en una época muy específica de mi vida, casi todo lo hice en casa y habla sobre eso, me recuerda a eso. Además, a medida que crezco hago más discos en los que se refleja mi “personalidad” de ese momento. Y al crecer, algunas cosas las entendés mejor, y otras las entendés menos. Pero sí, incluso un año después de hacer un determinado disco, el que le sigue va a ser más maduro.
Bueno, exactamente. Sos bastante prolífico, publicás mucho. ¿Tenés algún proceso de selección de qué grabar o preferís grabar todo lo que sea posible?
Trato de escribir todas las canciones que puedo pero tampoco soy una máquina de componer hits así que lo que tengo en mente es juntar una colección de canciones y usualmente gabarlas a todas de una. No dejo de trabajar una canción hasta que no esté terminada, y la única manera de terminarla es grabándola.
¿Y ya estás pensando en un nuevo disco?
Pese a lo que te decía, no tengo mucho tiempo para grabar porque estoy en medio de las giras pero sí, siempre estoy pensando en qué es lo próximo que quiero hacer, qué quiero tocar y qué tipo de disco quiero hacer. El período de especulación es como “ok, puedo hacer esto, puedo hacer aquello” pero cambia por completo cuando de verdad te sentás a componer y grabar, así que por el momento tendré que esperar y ver qué pasa cuando me ponga de lleno con eso.
En tus videos siempre actuás y de hecho estuviste en el video de Ducktails. ¿Es algo que te llama la atención o lo hacés por diversión? ¿Pensaste alguna vez en protagonizar una película, un corto?
Emmm… lo haría si alguien me lo pide pero pasa que solamente soy bueno para actuar de mí mismo, exagerar esa versión de mí, pero no soy particularmente bueno para recordar guiones y esas cosas. No sé si sería un buen actor, pero quién dice, alguna vez.
Bueno, hace poco se publicó un corto que tenía tu nombre, se especuló con tu actuación pero fue desmentido. ¿Qué pasó ahí?
Es muy gracioso porque todos los medios publicaron eso, los blogs y todo, pero la cosa es que el que lo grabó fue uno de los tantos chicos que vinieron a casa a tomar café. Y me pidió si le podría leer unas líneas, de un papel que tenía en la mano, así que lo hice, como un favor. Y después en el trailer fue como: “¡MAC DE MARCO protagoniza…!”. Y eso lo hice en, probablemente, menos de un minuto (risas). No lo hubiese hecho de otro modo pero fue uno de los chicos que vino a casa. Y todo bien, obvio. Pero, vamos… ¡no estoy protagonizando tu película! ¡Ni siquiera apareciendo!
Fue una gran ayuda para él, de eso no quedaron dudas.
Sí, más vale. Seguro que su película tuvo un poco de prensa pero un poco que se aprovechó de mí al publicitarlo así. Come on, buddy.
Cambiando de tema, el fin de semana en un recital al que fui tocó un tipo que en varias de sus canciones abordaba el tema de sexo con menores, medio en broma, medio en serio. No es por comparar, pero por ejemplo vos tenés canciones que son oda a los cigarrillos, que es algo “malo”. ¿Qué pensás de la moralidad en el arte?
Um, la gente está un poco torpe con eso. Es gracioso para mí, por la posición en la que me encuentro ahora mismo, de tocar frente a muchos chicos jóvenes. Por ejemplo, en el Reino Unido que si prendés un cigarrillo en el escenario te hacen una multa porque supuestamente sos el modelo a seguir de esta juventud y esas cosas… La verdad es que no pretendo ser el modelo a seguir de nadie y todos tenemos que ser buenas personas pero a la vez distraernos. La cosa de la moral está bien loca en estos días, entrás en un territorio en el que pasan muchas cosas. Yo trato de ser lo más directo posible y escribir sobre lo que realmente sé. Eso es lo importante para un compositor, atenerse a lo que uno sabe.
Para ir terminando. Hace poco hicimos la lista de los mejores discos de los ’90, ¿cuál elegirías vos?
Discos de los ’90… Veamos. Voy con Significant Other de Limp Bizkit y el single “American Bad Ass” de Kid Rock.
¿Episodio favorito de Los Simpson?
Soy un poco malo para recordar esas cosas. Me encantan los episodios y todo, pero no soy el tipo de chico que puede responder un quiz sobre Los Simpsons. Este fin de semana estuvimos viendo la temporada 7 pero mi episodio favorito es “Marge vs. The Monorail”. ¡Lo escribió Conan O’Brien, papi!
Mac DeMarco se estará presentando por segunda vez en Buenos Aires el domingo 15 de noviembre en Groove, con localidades agotadas. Viene a presentar su más reciente disco, Another One.