Pavement nunca supo decidir entre tomarse demasiado en serio o burlarse por completo del rock alternativo. La banda estadounidense gozó de una carrera marcada por las idas y venidas como una relación sentimental volátil con un final inevitable.
Entre 1989 y 1999, el grupo trajo al mundo cinco álbumes de estudio repletos de sonidos estridentes, letras ingeniosas que rozaban el absurdo y una actitud escénica que oscilaba entre la apatía fingida y el caos controlado. A pesar de su aparente falta de ambición comercial, Pavement cosechó un estatus de culto que perdura hasta hoy, dejando un legado de canciones extrañamente pegadizas y la sensación de que, en el fondo, sí les importaba un poco (pero no demasiado).
La banda nació en Stockton, California, primero como un dúo conformado por Stephen Malkmus y Scott Kannberg, ambos cantantes, guitarristas y compositores. Su ambición experimental los diferenció del resto, marcando un camino propio hacia el garage rock. Con una actitud de perfil bajo y anticomercial, Pavement se alejó de las estrategias convencionales de la industria, ganando un público fiel dentro de la escena indie que florecía en la década de los 90. La banda se expandió con la incorporación del baterista Gary Young, el bajista Mark Ibold y el tecladista Bob Nastanovich, completando la formación clásica que los catapultó al éxito.
Las guitarras de Pavement, empapadas en efectos, rugen con crudeza lo-fi, creando paisajes sonoros donde la melodía se funde con el ruido en un ritual embriagador. La distorsión y el fuzz dotan a las rítmicas de un vigor arrollador, mientras que la poética es una mezcla de humor ácido, observaciones perspicaces sobre la sociedad y referencias culturales que van desde el rock clásico hasta la cultura pop.
Tras una década juntos, Pavement decidió ponerle el punto final a su primera etapa. Pasaron otros diez años hasta que emprendieron una brillante y fugaz gira de reunión, que los trajo por primera vez a la Argentina. “Buenos Aires es una ciudad que parece vivir de noche, y fue una experiencia muy positiva y memorable -recuerda Bob Nastanovich en conversación con Indie Hoy-. Desde que me fui, recomendé a muchas personas que visiten Buenos Aires como turistas, porque es un lugar muy divertido y con una gran belleza arquitectónica. Pasar 60 horas allí fue simplemente increíble”.
La alegría duró poco y todo fan de Pavement se tuvo que enfrentar ante otra desilusión ya que el acuerdo no se extendió demasiado. Aunque sus planes de reunirse nuevamente en 2020 se vieron frustrados por la pandemia, el quinteto volvió a los escenarios en 2022 con la reedición de su último disco publicado en 1999, Terror Twilight, junto a una selección de 45 canciones, de las cuales 28 eran inéditas. ¿La tercera será la vencida?
Pasaron 14 años desde que Pavement retumbó en Buenos Aires con dos noches inolvidables en La Trastienda. Ahora, la banda californiana volverá a pisar suelo porteño con un único show este miércoles que contará con la apertura de 107 Faunos. Antes de este esperado reencuentro, hablamos con Bob Nastanovich sobre el pasado, presente y futuro de una de las bandas más emblemáticas del rock alternativo.
Durante las pausas prolongadas de la banda, ¿cuál era el álbum que más te reconectaba con los años de escenario y te provocaba una sensación de añoranza?
Wowee Zowee más que nada, porque fue cuando la banda se sintió como una unidad completa. Ese es el álbum en el que los cinco contribuimos y sentimos que éramos uno. Fue un período de tres años en medio de la existencia de la banda, donde nos sentimos, por decirlo de alguna manera, como una banda real. Así que siempre es mi favorito, además de Watery, Domestic (1992), que es un gran EP con cuatro canciones. Obvio que me encanta Brighten the Corners (1997), siento que fue en un momento en el que estábamos en una especie de zona de confort. Se grabó en medio de la nada en Carolina del Norte con un tipo realmente famoso, Mitch Easter, que había hecho algunos discos geniales de R.E.M. que amábamos cuando éramos niños. Así que fue un honor grabar con él, y sentí que habíamos pasado por un montón de cosas, incluido Lollapalooza, para cuando hicimos Brighten the Corners. Así que creo que es un disco realmente relajante y genial. Entonces, para mí es: Wowee Zowee primero, Brighten the Corners segundo y Watery, Domestic tercero.
¿Cómo era la escena underground hace 30 años cuando salió su segundo disco, Crooked Rain, Crooked Rain? ¿A qué creés que se debió su éxito?
Cuando Crooked Rain, Crooked Rain salió, básicamente tenías miles de bandas que existían fuera del mainstream. Y los sellos independientes de punk rock se habían convertido en una parte significativa de la cultura musical, a través de cosas como fanzines y obviamente, muchas giras y pequeños locales geniales, buenas tiendas de discos y radios universitarias. Así que había muchos factores en juego a finales de los 80 y principios de los 90 que hicieron que la música underground fuera viable. Y luego, por supuesto, había varias bandas elegibles para romper barreras en la industria en términos de una banda underground que se convirtiera en conocida y exitosa a nivel mundial. Así sucedió con Nirvana, con la fuerza de sus canciones y una figura intrigante como Kurt Cobain y, los otros, Krist Novoselic y el tipo de Foo Fighters. Hubo mucho enfoque en bandas como nosotros, y así fue que sacamos un disco en 1994 que fue muy bien recibido. Creo que la gente pensaba que Pavement iba a ser más grande de lo que realmente fuimos.
¿La postura anticomercial que caracteriza a Pavement tuvo algo que ver en eso?
Hay muchas razones de por qué no fuimos más grandes y no fue la música. La música definitivamente podría haber tenido un mayor atractivo, pero tampoco fue intencional que evitáramos la fama. Esa también es una idea errónea sobre Pavement. Intentamos ser tan exitosos como pudimos. Un aspecto realmente clave de ser una banda en ese entonces era tu nuevo video en MTV, y no queríamos gastar dinero en eso porque no nos sentíamos cómodos haciéndolo en primer lugar. No parecía una cosa natural para nosotros y no podíamos entender cómo hacerlo. Así que cuando hicimos un video, contratamos a nuestros amigos y los hicimos muy baratos. MTV quedó bastante decepcionado con nuestros videos. No podían realmente ponerlos porque eran muy caseros y nos decían que no era lo que estaban buscando. Obviamente, hoy ya no son un factor en la industria musical, pero en los años 90, MTV era enorme. Y luego, en cuanto a la banda, había tanta demanda de Pavement en 1994 que hicimos giras constantemente. Hicimos 200 shows o más en 1994. Estábamos increíblemente ocupados. Fue agotador, pero pasamos tanto tiempo en la ruta que básicamente compusimos al menos dos tercios, si no tres cuartos, del material que eventualmente terminó en Wowee Zowee. Así que de alguna manera fue bueno para Pavement porque estábamos tan ocupados tocando que empezamos el año como una banda en vivo muy mercurial. Nos volvimos un poco más seguros y nos convertimos en una banda real. Pasamos tanto tiempo juntos y cuando no estábamos de gira casi nunca nos veíamos. Así que creo que benefició a Pavement al final, a pesar de que fue muy devastador y agotador. Nos hizo sentir como en el 92 cuando fuimos por primera vez a giras mundiales después de Slanted and Enchanted. Nos sentimos un poco como una banda real en ese momento y luego después, en el 94, nos sentimos una banda profesional, pero teníamos esta renuncia natural a abrazar la industria.
Los únicos shows de Pavement en Argentina fueron los de 2010 en marco del Hot Festival, ¿qué te acordás de esa visita a nuestro país?
Comenzamos en Sao Paulo, tocando en algún festival, era muy tarde en la noche y el festival era grande. Pero lo extraño fue que la audiencia estaba muy lejos del escenario, lo que hacía sentir que no había mucha gente. Luego llegamos a Buenos Aires, donde el aeropuerto está un poco alejado de la ciudad, pero en el camino noté que mucha gente simplemente se detiene y se relaja, lo que me pareció interesante. La ciudad misma era muy accesible y divertida, tanto por su diseño como por la gente. Me sentí inmediatamente cómodo y relajado en Buenos Aires. Fui solo al hipódromo y vi correr a los caballos. Luego tocamos dos conciertos en La Trastienda, los últimos de 2010, en un ambiente acogedor y con una audiencia tan entusiasta que fue imposible hacer una mala presentación. Fue como retroceder a los años 90 en el Reino Unido, la gente solo quería escuchar música y divertirse. Los shows fueron muy memorables, con una energía increíble y un sonido cálido y rico en ese tipo de lugar. Después de tocar, pasamos algunas noches inolvidables.
Una década más tarde, en 2022 regresaron a los escenarios para defender la reedición de su último trabajo discográfico, Terror Twilight. ¿Qué podés contarnos acerca de ese extenso lanzamiento?
Esas canciones fueron escritas a finales de los 90 y, curiosamente, no fue un álbum típico de Pavement. Stephen Malkmus estaba frustrado con la banda porque sentía que estábamos descansando en nuestros laureles y no estábamos contribuyendo lo suficiente. Su frustración era comprensible. Él escribió la mayoría de las canciones de todos modos, pero en particular, ese álbum era más de Stephen que cualquiera de los anteriores. Por eso hay algunas canciones en ese álbum que nunca pudimos tocar bien, las intentamos pero nunca funcionaron. Así que, para cuando llegaron los años 2010 y luego 2022, habíamos descubierto las cinco o seis canciones de ese disco que funcionaban perfectamente en vivo. Dado que Pavement es en este momento solo una banda en vivo que hace giras de manera esporádica, intentamos tocar las canciones que más van a gustar a nuestra audiencia. Obviamente, tenés que tocar las canciones que conocen mejor. Y luego, aparte de esas, tenés que tocar las canciones que creés que podés tocar bien. En cuanto a Terror Twilight, hay unas cinco o seis canciones en ese álbum que podemos hacer… y estoy bien con eso. Ya no lo pienso como una era, solo como un álbum en el que algunas canciones resistieron la prueba del tiempo y siguen siendo interesantes. Hay canciones en cada disco de Pavement que no me gustan, pero eso es solo porque soy un fan y, al igual que vos y cualquier otro, hay algunas canciones que me gustan más y otras menos. Así que cuando me encargo de la lista de canciones para el vivo, la edito de esa manera y la hago divertida para mí, porque, básicamente, esa es una parte privilegiada de mi trabajo.
“Harness Your Hopes” se volvió viral en TikTok una vez más. ¿Qué pensás sobre esta nueva forma de consumir música en la actualidad?
Estoy bien con eso porque “Harness Your Hopes” es una canción genial que probablemente deberíamos haber terminado más en los años 90 cuando se hizo. Terminó siendo un lado B porque pensamos que era probablemente demasiado tonta. No anticipamos que TikTok iba a abrazar una canción oscura de Pavement y que a los jóvenes les encantaría. Pero lo genial de “Harness Your Hopes” es que abre muchas puertas para que los jóvenes descubran a Pavement, y eso parece estar sucediendo. Así que es beneficioso y leal para nosotros, y obviamente tenemos que tocarla todas las noches. Es una canción simple y un poco tonta con letras extrañas, no creo que esté ni cerca de ser la mejor canción de Pavement, pero si a la gente le gusta, la vamos a tocar.
Tu presencia escénica siempre fue algo que te caracterizó, desde tu forma de tocar hasta tu forma de moverte y gritar. ¿Qué te motiva hoy en día a mostrarte tan feliz de estar frente a tu público?
Para mucha gente, su cosa favorita es la música en vivo. Hubo un período en mi vida, diría desde los 15 hasta los 35 años, donde la música en vivo era mi forma favorita de entretenimiento. Vi miles y miles de bandas en vivo, y hacía largos viajes por autopista para ir a shows. Tuve la suerte de crecer y vivir en lugares que tienen mucha música en vivo genial y muchos artistas interesantes. Durante el COVID, la música en vivo desapareció y eso frustró a mucha gente, por eso volver a hacer giras en 2022 fue increíble. Vimos a personas que no solo les gusta Pavement, sino que estaban felices de volver a ver música en vivo. La mayoría de las noches fueron súper divertidas y muy energizantes, un verdadero placer. Hay muchas canciones de Pavement en vivo donde puedo interactuar y mirar al público, sonreír y pasarla bien. Parece que la gente en esta época está feliz de ver a Pavement y están felices de volver a ver música en vivo después de la pandemia. En algún momento supongo que se acostumbrarán a la música en vivo, pero ahora mismo creo que la gente está muy emocionada, porque no sabían si volverían a poder hacerlo. Cuando algo desaparece durante dos años, muchos locales cierran y todo el clima cambia, y luego, por supuesto, hay tantas bandas esperando hacer giras nuevamente, es genial tener gente que sea apasionada con nosotros y que se preocupe por nosotros. Estamos esperando volver a Buenos Aires tanto como a cualquier otra ciudad. Y no estoy mintiendo, porque ustedes son geniales y divertidos y les encanta Pavement. Así que estoy deseando que llegue. Lo juro.
Pavement se presenta el miércoles 15 de mayo a las 20 h en C Complejo Art Media (Av. Corrientes 6271, CABA) junto a 107 Faunos, entradas disponibles a través de Passline. Escuchá Terror Twilight: Farewell Horizontal en plataformas de streaming (Spotify, Tidal, Apple Music).