“Ya nadie escucha bandas, ni lee revistas. Está claro que nadie conecta con el rock en el ferviente arraigo de sentirse identificado. Esa postura mutó, se mofó de sí misma y se extinguió. A nosotros cinco hacer música nos salvó de lo hecho mierda que está el mundo”, escribía Revistas en su primer posteo en Instagram el 7 junio de 2021, en plena post pandemia. Una carta de presentación un tanto pesimista, redactada en tiempos donde encarar un nuevo proyecto musical parecía irrisorio y sin sentido, salvo que se hiciera pura y exclusivamente por dos únicos razones: por amor o por necesidad. Ellos lo hicieron por ambas.
“Empezamos de cero y nos enfrentamos al cero -cuenta Martín Rulli alias Rullix en conversación con Indie Hoy antes de su show esta noche en Niceto Club como parte del Festival Refresco-. Cuando arrancamos con la banda sinceramente no esperábamos nada. La formamos a raíz de la necesidad que teníamos de hacer música en un contexto en el que no podías hacer nada“. Sin embargo, cuando las aguas se calmaron y el panorama comenzó a despejarse lentamente, se encontraron con que al lado suyo habían pibes y pibas con las mismas ganas de remar contra la corriente y ensamblar una nueva escena desde la autogestión y la colaboración.
“Cuando salimos a la cancha nos encontramos a un montón de bandas que estaban en la misma que nosotros. Grupos que querían trabajar de la misma forma que nosotros, detrás de un mensaje y una estética en particular -interviene Joel Fiorire alias Linyero, bajista y voz del quinteto-. Después de la cuarentena hubo una renovación sentimental por parte de la juventud a través de la catarsis, el baile y los recis que nos ayudó mucho. Fue mágico“.
En ese recorrido, estrecharon vínculo con grupos como El Club Audiovisual, Fin del Mundo y Mujer Cebra, esta última la bautizaron como su “banda hermana”, después de que la fecha de lanzamiento del disco debut y homónimo del trío coincidiera con la salida del primer LP de Revistas. Un hecho fortuito del destino con los mantiene unidos hasta el día de hoy.
Así es que el 26 de noviembre de 2021 salió Drama, un álbum conceptual que se mueve entre texturas oníricas y capas complejas, basada en la observación rigurosa de lo cotidiano: sus colores, contradicciones, conflictos e interrogantes. Una crónica atemporal que sigue los vaivenes de vivir en una sociedad individualista y que se ve reflejada en cada una de las canciones que lo componen.
Un ejemplo de esa cualidad inalterable al tiempo es “Urgente“, tema que llama a la condición de resistencia de cualquier tipo, pero que originalmente fue inspirado por la movilización de mujeres que lucharon por el aborto legal, seguro y gratuito en 2020. “Como artistas tenemos la desgracia o la suerte de ser más sensibles a las cosas que lo rodean y que nos pegan. Por eso está bueno que las letras trasciendan su propio significado“, dice Linyero.
El primer single que publicaron como banda, y para presentar lo que sería su primer trabajo de estudio, fue “Elefante“, un relato terrenal sobre su ciudad natal a través de la imagen del complejo habitacional Estrella del Sur, que actualmente simboliza una estafa millonaria a decenas de familias las cuales no pudieron acceder a su vivienda.
“Al salir de nuestras casas lo primero con lo que nos topábamos siempre era el Elefante Blanco. Pasabamos con el tren, con el bondi, con el auto, y lo que se siempre se veía era ese tótem gigante de cemento que nos acompaña todos los días. Como todas las canciones de Drama venían hablando sobre lo que veíamos a diario, creímos que se merecía su propio tema”, continúa el cantante.
Un año después, Revistas sacó a luz un EP titulado Polución, que profundizó lo expuesto en su disco debut. “Drama es lo que pasaba a nuestro alrededor y cómo eso nos afectaba, mientras que Polución es el producto de eso, un punto de vista más personal sobre las repercusiones de la pandemia“, explica Rullix mientras que su compañero interviene para contextualizar: “Cada uno caía al estudio con una pregunta que le había surgido de la cotideaneidad de su vida y la tomábamos como disparador”. A diferencia de su antecesor, Polución fue un material que surgió en el estudio casi en su totalidad, con los miembros de la banda terminando las letras pocos minutos antes de entrar a grabar cebados por el envite de esa adrenalina.
La inspiración de este EP provino de distintas partes, y Linyero se toma el tiempo de explicar una por una: “‘Polución‘ surgió en un momento donde estaban tratando de instalar empresas petroleras en Mar del Plata; ‘Interior‘ es prácticamente una canción de amor y trata sobre cómo uno deja que este pase cuando aparece; ‘Ausencia‘ habla netamente de la ansiedad y de la soledad; y ‘Roderer‘, se basa en un libro llamado Acerca de Roderer de Guillermo Martínez que está buenísimo y nos parecía lindo pasarlo a una canción”.
“Si en Drama tiramos toda la carne al asador, en Polución decidimos ser más minimalistas. Nunca hay más de tres cosas sonando. Tiene más aire, porque de alguna forma buscamos una manera de sintetizar nuestro sonido musical”, cuenta Rullix, mientras que Linyero vuelve a tomar la palabra: “A diferencia del primer disco, este fue un trabajo más colectivo, donde cada uno tenia claro su lugar en la banda. Esa fórmula fue moldeando artísticamente el sonido del disco y también lo conceptual”.
Al 2023, el conjunto lo define como “el año de los singles” y no hay mejor descripción para comprender su enfoque estos últimos meses hasta la actualidad. En su insistente inconformidad por abarcar texturas inexploradas, la banda dio con Mariano Di Césare -mente detrás de Mi Amigo Invencible y el proyecto solista El Príncipe Idiota– para la producción de sus nuevas canciones, y con Estanislao López -a quien definen como “el parlante de una generación”- para la ingeniería del sonido en los estudios Unísono. Un dream team perfecto para dar en la tecla con el sonido que estaban buscando, en una base de operaciones vital para poder materializarlo.
“La primera vez que vi a Mi Amigo Invencible fue hace 10 años en el Konex y ahora tenerlo a Marian tan cerca y laburando con nosotros es un flash desquiciadísimo”, confiesa Linye sobre su vínculo con el músico mendocino. “A Estani lo conocíamos de laburar con bandas amigas y nos volaba la cabeza lo que hacía, así que quisimos traerlo para nuestro equipo“, agrega sobre López, reconocido por su trabajo con Mujer Cebra, El Club Audiovisual y Buenos Vampiros.
“Nosotros ensayamos en San Telmo, es nuestro lugar de junte y de salidas. Cuando nos juntamos con Marian y Estani a hacer la preproducción de lo que va a ser el nuevo disco, nos pidieron que la presión que nosotros ponemos en los vivos se traduzca en el estudio -recuerda Rullix sobre los primeros encuentros para determinar hacia dónde viraría su próximo material-. Después, Mariano nos dijo que, si bien le encantaba la banda, le gustaría poder sintetizar nuestro sonido en algo más compacto y claro, y hacia eso vamos”.
Hasta el momento, Revistas dio a conocer tres singles de lo que será su segundo álbum de estudio: “El deseo“, “La maldad” y “¿Qué importa?“, que sirven como una pequeña prueba de lo que estará hecho su próximo material. El dúo adelanta que lo que resta del LP se grabará los últimos días de febrero y, aunque se niegan a revelar su título, adelantan que se trata de una obra cuyo concepto estará marcado por la dualidad de estos tiempos, donde la hostilidad y la violencia convive con el resguardo, y la tranquilidad que brindan los vínculos afectivos.
Revistas se presenta el jueves 15 de febrero a las 20 h en el festival Refresco en Niceto Club (Av. Niceto Vega 5510, CABA) junto a Los Látigos y Ryan, entradas disponibles a través de Passline. Escuchá “¿Qué importa?” en plataformas de streaming (Spotify, Tidal, Apple Music).