Bobby Gillespie lleva más de cuatro décadas haciendo música y tiene un amplio conocimiento en la materia. Para alguien con tantas canciones y discos escuchados, parece tarea imposible decantarse por un solo álbum, pero en una entrevista confesó que su favorito de toda la historia es Jailbreak, de la banda irlandesa Thin Lizzy.
“Es mitad hard rock y mitad baladas. Una gran mezcla de cosas”, señaló el escocés. Acto seguido, Gillespie señaló que “[el cantante y bajista original] Phil Lynott intentó replicar eso en todos los álbumes de Lizzy posteriores y fue realmente difícil, porque le salía de forma muy natural. Él aportó una sensibilidad poética y romántica al rock. Por eso la gente lo amaba y lo sigue haciendo”.
Grabado entre diciembre de 1975 y febrero de 1976, el disco logró ubicarse en el top 10 de los rankings británicos gracias a canciones como la mencionada “Cowboy Son”, “Jailbreak” y “The Boys Are Back in Town”, una de las favoritas de Gillespie. “Ese disco me llegó en el momento justo. Tenía quince años y ‘The Boys Are Back In Town’ estaba en todas partes”, reveló.