En diciembre de 1984, Leonard Cohen lanzó "Hallelujah" en su séptimo álbum Various Positions, una obra que inicialmente pasó desapercibida. Sin embargo, con el tiempo, esta canción se transformó en un himno universal, reinterpretado por más de 200 artistas y presente en innumerables eventos culturales, series y películas.
Cohen tardó cinco años en darle forma a "Hallelujah", creando más de 80 estrofas en el proceso y seleccionando cuidadosamente las que finalmente grabó. El resultado final es una letra que entrelaza referencias bíblicas a personajes como David, Sansón y Betsabé con emociones humanas, explorando temas como el amor, la pérdida, la fe y la duda.
La canción ganó reconocimiento cuando el músico galés John Cale la versionó en 1991, seguido por Jeff Buckley en 1994. Cohen, aunque reconocía el uso excesivo de la canción, apreciaba los distintos covers y la capacidad de su creación para resonar en diferentes espacios y públicos, algo que ocurre hasta el día de hoy, ya que "Hallelujah" continúa siendo una invitación a la introspección y la redención.