Frank Zappa decía lo que pensaba en todo momento, fuera bueno o malo. Un claro ejemplo de esto fue cuando afirmó que uno de los discos de Bob Dylan sonaba como “música de vaqueros”. Según admitió en diálogo con el escritor Clinton Heylin, al escuchar “Like a Rolling Stone”, Zappa quiso “dejar la música”.
Sin embargo, lo curioso de la declaración es que para julio de 1965, el violero todavía no había editado ninguno de sus más de 60 discos de estudio. “Sentí que si esto gana y hace lo que se supone que debe hacer, no necesito hacer nada más”, continuó Zappa. “Pero no hizo nada. Se vendió pero nadie respondió como debería haberlo hecho”.
Contrariamente, el oriundo de la ciudad de Baltimore afirmó que Highway 61 Revisited, el disco en el que se encuentra el himno de Dylan, “fue realmente bueno”. Sin embargo, no opinaba lo mismo de su sucesor: Blonde on Blonde. “Luego obtuvimos Blonde on Blonde y empezó a sonar como música de vaqueros. Ya sabes lo que pienso de la música de vaqueros”.
Podemos entender a la anterior como una dura crítica si recordamos las palabras de la escritora y guitarrista, Nigey Lennon, quien era amiga de Zappa: “Tenía un odio instintivo hacia casi todo Estados Unidos, especialmente a los vaqueros”.