No caben dudas de que el amor es el principal protagonista de una gran cantidad de canciones. Sin embargo, no todas hablan acerca del amor ideal, sino que algunas, por el contrario, reflejan lo que pasa cuando las cosas salen mal. En esos casos, las decepciones, rupturas, traiciones o simplemente el cansancio de estar con la persona equivocada toman el primer lugar.
Las canciones anti amor no buscan consolar a los oyentes, sino ser un canal para que el artista pueda decir las cosas como son, sin filtros ni adornos. Desde el rock hasta el folk o el pop más crudo, muchos grupos y cantantes usaron sus tracks para descargar frustraciones sentimentales.
A continuación, seis de las mejores canciones anti amor de todos los tiempos.
6. The J. Geils Band – “Love Stinks”
Single principal del álbum Love Stinks (1980), producido por Seth Justman. Es un rock directo con letra cruda sobre el desamor y el triángulo amoroso que inspiró la canción. Grabada en Long View Farm, alcanzó el Top 40 en EE.UU. y Canadá.
5. Joan Jett & the Blackhearts – “I Hate Myself for Loving You”
Del disco Up Your Alley (1988), coescrito con Desmond Child y producido por Kenny Laguna. Con solo de Mick Taylor, se convirtió en uno de sus temas emblemáticos.
4. Fleetwood Mac – “Go Your Own Way”
Incluida en Rumours (1977), producida por la banda y escrita por Lindsey Buckingham tras su ruptura con Stevie Nicks. Su letra expresa el dolor y las tensiones internas del grupo durante la grabación del disco.
3. Def Leppard – “Love Bites”
Parte de Hysteria (1987), producido por Mutt Lange. Balada pesada cuya letra se enfoca en la toxicidad amorosa. Alcanzó la cima del ranking Billboard y representa el lado oscuro del enamoramiento.
2. Bob Dylan – “Don’t Think Twice (It’s All Right)”
Del álbum The Freewheelin’ Bob Dylan (1963), producido por Tom Wilson. Aunque cuenta con un tono suave, el tema destila resignación y liberación ante un amor perdido.
1. Nazareth – “Hair of the Dog”
Incluida en el álbum homónimo de 1975, producido por Roger Glover, la pista presenta un riff pesado y una letra frontal en la que la palabra “perro” hace referencia al amor tóxico. Esta canción encarna la furia contra una relación destructiva.