El grunge fue la reinvención del rock en la década del 90. Luego de años signados por el rock clásico, el heavy metal, el rock progresivo y el punk, las bandas grunge tomaron múltiples elementos sonoros y conceptuales de este último para crear un movimiento nuevo y en consonancia con la época.
Mientras el consumismo, la televisión y la sociedad mercantilizada y globalizada crecían a pasos agigantados, algunos jóvenes estadounidenses -sobre todo de Seattle- se dedicaron a rugir sus pesares y a poner de frente las emociones, acompañados de guitarras ruidosas.
A continuación, repasamos los 10 mejores discos de grunge según Rolling Stone.
10. Pearl Jam - Vs (1993)
Pearl Jam es una de las bandas más importantes de la escena grunge de los 90 y su segundo disco, uno de los fundamentales de su carrera. En este álbum participa por primera vez Brendan O'Brien, el productor que trabajaría con la banda durante muchos años. Luego del éxito de Ten, su disco anterior, la banda estaba experimentando los cambios que vienen con la fama. En este sentido, Eddie Vedder expresó: "En el primer disco estábamos viviendo en un sótano. En el segundo, me sentía muy lejos del sótano. Y era un lugar difícil para mí para escribir un álbum".
9. Soundgarden - Superunknown (1994)
Este es el disco más exitoso de la carrera de Soundgarden, una pieza fundamental para definir el grunge y un álbum infaltable del hard rock. Nominado a un premio Grammy, fue consecuencia de una época de exigencias del mercado, con presión por aparecer en la televisión y formar parte de escenarios internacionales, tal como declaró Chris Cornell a Rolling Stone. Aun con la presión comercial, lograron un álbum superador de los anteriores, con un sonido contundente, grandes hits y una identidad que consolidó definitivamente a la banda.
8. Nirvana - In Utero (1993)
Luego del gran éxito de Nevermind, Nirvana se despachó con un disco más irregular, justamente por su falta de corrección y su espíritu rebelde. Mientras el anterior se presentó como un álbum redondo, este incluyó secciones más delirantes como “Very Ape”, “Tourette’s” y “Milk It”: canciones crudas, rudas en su instrumentación y más experimentales en cuanto a estructura. Aun así, el disco contiene grandes hits como “Heart-Shaped Box”, “All Apologies” y “Rape Me”.
7. Temple of the Dog - Temple of the Dog (1991)
Este es el único disco de la banda, pero bastó para que se volviera una pieza icónica del grunge. Se trata de una colección de canciones nacidas del duelo y el dolor que Chris Cornell escribió luego de la muerte de Andrew Wood, cantante de Mother Love Bone. En 2016, el músico dijo: “Se volvió catártico y divertido”, en referencia a un disco que contiene varias baladas rockeras y letras marcadas por la pérdida y el arrepentimiento.
6. Alice in Chains - Dirt (1992)
Alice in Chains es una de las bandas fundacionales del grunge y este disco, su propuesta más aclamada. La vida y la obra de Layne Staley, cantante y compositor de la banda, estuvieron marcadas por el abuso de drogas, y en este trabajo se vuelcan esas experiencias. Así lo declaró en una entrevista con Rolling Stone: “De canción a canción, el álbum cambia de glorificar las drogas a estar completamente miserable y cuestionarse lo que yo pensaba que una vez funcionó para mí. Para el final, es bastante obvio que no funcionó tan bien como yo creía”.
5. Mudhoney - Superfuzz Bigmuff (1990)
Desde su título, este disco pionero ya anuncia las características de su sonido, al hacer referencia a dos pedales de guitarra que otorgan el tono crudo característico de la banda. Si bien no fue un éxito de ventas, el tiempo le dio su oportunidad y hoy es valorado como uno de los principales motores del grunge. En sus canciones se aprecia la fuerte influencia del punk, fusionada con un estilo alternativo.
4. Hole - Live Through This (1994)
A pesar de que el grunge no tuvo mucho espacio para las mujeres, Courtney Love logró abrirse paso, incluso luchando con los prejuicios de ser "la esposa de" -de hecho, el disco fue lanzado días después de la muerte de Kurt Cobain-. Justamente, este álbum es una declaración feminista, incluso desde la ironía de su portada, en la que vemos a una reina de concursos de belleza. Además, el disco aborda temas como la maternidad, la feminidad y la situación de Love, quien se convirtió en una celebridad.
3. Pearl Jam - Ten (1991)
Este es, posiblemente, uno de los mejores álbumes debut del rock. Pearl Jam apuntó con precisión para lograr un disco repleto de hits como "Jeremy", "Alive" y "Black", y un sonido propio que abrevaba del hard rock. Como en estas tres canciones, el disco despliega temáticas realistas y pesimistas como el suicidio, la desolación y la depresión, que suelen ser parte de los discos más emblemáticos del grunge. Ten marca la llegada de Vedder a Seattle, absorbiendo y aportando a la movida que, en 1991, explotaría con los discos más emblemáticos del género.
2. Soundgarden - Badmotorfinger (1991)
En este disco de culto, la banda mantiene su estilo ligado al heavy metal y al hard rock, algo que se nota sobre todo en los sonidos de las guitarras, que apuntan a una pesadez mayor que otras propuestas del grunge. Soundgarden fue, posiblemente, una de las bandas más metaleras de la escena grunge, y en este disco vuelcan su costado más sofisticado en lo que respecta a las composiciones y las letras.
1. Nirvana - Nevermind (1991)
Si bien los años 90 estuvieron repletos de bandas y discos que forjaron el grunge, Nevermind se coronó como el más emblemático. En parte gracias a su éxito comercial, a la figura de Kurt Cobain como cara visible de la escena novedosa de Seattle y también porque sus canciones, con una buena dosis de pop en las melodías y la suficiente rudeza en su instrumentación, hicieron que el álbum se volviera altamente popular.
Con una de las portadas más paradigmáticas del rock y una lista de canciones en las que no se puede saltear ninguna, Nevermind es la representación del grunge: el enojo de una generación, guitarras que rugen, el expresionismo para gritar las emociones (elemento que liga este género musical al existencialismo filosófico) y la rebeldía contra una sociedad cooptada por el consumismo.