1995: Blur vs Oasis. La batalla por el cetro del britpop estaba en plena ebullición. Mientras tanto, otras bandas como Pulp, Manic Street Preachers, Supergrass y los resucitados Stone Roses gozaban de buena salud y menos presión. Entre ellas apareció Elastica, con Justine Frischmann (ex de Brett Anderson y nueva novia de Damon Albarn en ese entonces) como líder. A diferencia de sus contemporáneos, el grupo de Londres, compuesto en su totalidad por mujeres, se caracterizó por su gran uso de punk rock y post punk en su repertorio (breve pero notable y de culto).
Luego de estar a la sombra del cantante de Suede (donde tuvo un paso fugaz), Justine decide formar Elastica junto a Justin Welch en batería. Luego de firmar con Deceptive Records (y posteriormente en Geffen Records), lanzan su LP homónimo en 1995. Elastica fue éxito total en Reino Unido: una catarata de hits, desde “Line Up”, pasando por “Connection”, “Blue”, “All Nighter” y “2:1” (incluido en Trainspotting). La crítica especializada no se cansó de valorar el talento de Justine. El disco contiene amor, noche, dedicatorias a amigas, soledad, desencuentros y todo lo que un mortal puede vivir en su vida. Por eso pegó: por su simpleza, crudeza y sentimentalismo. Si a eso le sumamos la alta rotación que tuvieron los sencillos “Stutter” (tema viejo que había quedado en el tintero) y el mencionado “Connection”, las expectativas fueron superadas ampliamente.
Y además de todo: fue el debut más rápidamente vendido en el Reino Unido.
Si bien estuvieron poco tiempo en la cima debido al monopolio de Blur y Oasis (era como competir en la liga española contra el Barsa y el Real Madrid), lejos están de ser consideradas one hit wonders de la escena inglesa.
En 2000 editaron The Menace, su segundo y último álbum antes de separarse. Más allá de estar activas poco tiempo, la banda britpunk hizo historia en los ’90 con un disco sólido de letras eficaces y pegadizas, y se volvió una imagen de culto. Hicieron escuela e influenciaron a montones de bandas del nuevo milenio: más de las que uno se puede imaginar.