Un disco que llevó al thrash metal a su nivel más complejo y popular a la vez. Cuatro amigos de San Francisco que lograron su estado máximo de pureza cruda sin concesiones. Una banda que demostró que se puede llegar al éxito multi-platino sin los lineamientos preestablecidos por la industria. Un antes y un después para el género, como no a vuelto a pasar. Por todo eso, hoy recordamos …And Justice for All.
Para agosto de 1988, Metallica era la gran promesa del heavy metal. Después del brillante Master of Puppets y la trágica muerte de Clif Burton en 1986, la banda se volvió el responsable natural de dar el gran golpe y llevar la evolución del género pesado a un lugar que marcara la diferencia. Y lo lograron.
¿Cómo? Trataré de ser breve.
Lars Ulrich y James Hetfield componen la mayor parte del disco, convocan a Mike Clink (responsable de Appetite for Destruction de Guns N’ Roses) y lo sustituyen por Flemming Rasmussen, el productor elegido en primera instancia. Luego consiguen a Jason Newsted como nuevo bajista, quien haría su estreno como miembro estable de la banda después de haber grabado en el EP The $5.98 E.P.: Garage Days Re-Revisited. Su influencia, junto a la de Kirk Hammet, se volverá de acá en más fundamental, y daría forma a la nueva producción de Elektra Records.
Por decisión de la dupla Ulrich/Hetfield, predominan las guitarras y baterías ante cualquier otro instrumento. El encargado de la mezcla del disco, Steve Thompson, declarará en 2015 que fue Ulrich quien le pidió que bajara al mínimo los decibeles de las notas tocadas por Newsted, y esto no los librará de críticas por parte de la prensa. Sin embargo, con “One” y su videoclip (el primero de la banda) en constante rotación en MTV, Metallica alcanzará un éxito sin precedentes para una banda de thrash metal.
La única letra del disco que no tendrá la firma de Hetfield será “To Live is to Die”, compuesta a partir de un poema de Cliff Burton. El disco estará completo con “Blackened” y “Harvester of Sorrow” (cabe destacar su versión en vivo en la presentación de los míticos Monsters of Rock en una Rusia recién salida del régimen soviético), temas que hasta el día de hoy son clásicos en sus presentaciones en vivo. Themis, la diosa romana de la justicia elegida por el diseñador Stephen Gorman para protagonizar el arte de tapa, aparecerá atada, enceguecida y con dólares cayendo de su balanza. Grabado en los estudios de la banda One on One Recording en Los Ángeles, …And Justice for All significaría el fin de una etapa para Metallica. De la mano de una obra compleja, ambiciosa y brillante, darían paso a una nueva era con la salida del Black Album tres años después. El resto ya es historia conocida.
…And Justice for All tendrá su reedición el 2 de noviembre con una versión extendida que incluirá demos, mezclas sin procesar, grabaciones en directo y un libro por fotos inéditas de Ross Halfin.
Metallica – …And Justice for All
1988 – Elektra
01. Blackened
02. …And Justice for All
03. Eye of the Beholder
04. One
05. The Shortest Straw
06. Harvester of Sorrow
07. The Frayed Ends of Sanity
08. To Live is to Die
09. Dyers Eve