“Voy detrás del humo de tu oración”
Colecho es la poesía de una Mujer-Madre en estado de sueño lúcido. Podría ser esa Mujer que está en la tapa, soñando plácidas palabras entre paréntesis, la transformación de algo en plena génesis, el germen que modificará Su mirada.
Noe Vera va detrás de lo invisible. Lo roza, lo ausculta y lo atrapa. Tiene una especie de capacidad prestidigitadora para tomarlo entre sus manos, sacudirlo hasta hacerlo manifiesto y entregarlo en un puñado de poesías.
Al leerla, se la puede ver a Ella, encontrando en la escritura una manera de transitar y compartir un período de tiempo determinado; incómodo quizás, un tanto indisciplinado; también inexorable.
Pero sobre todo, íntimo.
A pique
Cuando todo pase
el malestar, los mil doscientos caracteres
que debo escribir, la miseria que siento
cuando tengo todo, la náusea
que no vomito gira adentro
y cuando estalle en la pista dura eterna
el bulbo hermoso, luz perdida en la placenta
quizá tenga unas migas de segundo y me diseñe
algo mejor y abra más diarios
ahora que todo cierra, encaja, encripta
al llamado de la acción
palabras, palabras y por otro lado…
Lista
Ahora vivo así con el músculo cárdico
batiendo a mil, si te digo “nada”
cavá y cavá…
por ahora tengo: cuadernos vacíos
la mente como los platos
blancos, sucios, apilados
la cava exhausta, una remera flúo
para estrenar, leche en caja hasta diciembre
un par de tetas secas.