Ciertos discos parecen detener el tiempo. Son obras que experimentan con la temporalidad de tal manera que convocan a descansar en la imposibilidad de anticiparnos a lo que pueda ocurrir. Ese es el caso de Kalmtillo, Campo y Pillow Shots, tres discos editados en 2023 por artistas nacionales que orbitan el género ambient.
Su música se siente fuera de rejilla, desarmando el tiempo del reloj y desorientando la escucha con una repetición continua y permanentemente variada. Son composiciones guiadas tanto por la improvisación como por decisiones aleatorias, procesos que influyen en su carácter imprevisible y un lenguaje experimental.
Otras de las coincidencias que comparten estos tres discos es su carácter de la distancia, ya que experimentar con el tiempo influye también en la manera de percibir el espacio. Al aumentar y aletargar los sonidos se construyen imágenes de lejanía que se extienden casi de manera indefinida. A su vez, utilizan la grabación de campo de forma similar, convocan ritmos, texturas y melodías del paisaje para recomponer la música desde el afuera. Calcan el paisaje acústico y lo integran en su propia sonoridad.
María Solo y Aidons Antonie – Kalmtillo
Kalmtillo es el primer álbum del dúo argentino-belga conformado por María Solo y Aidons Antonie, publicado en mayo de 2023 en Bruselas a través del sello independiente Le Pacifique Records. Se trata de un disco producido sin previo plan en un viaje a Kalmthout en el norte de Bélgica, lugar al que el álbum le debe la primera sílaba del título “Kalm”, y a “tillo” por haber sido grabado en un castillo con la electricidad suficiente para hacer sonar un Casio SK-1 en el medio del jardín.
Está conformado por diez tracks como miniaturas melódicas que podrían ser capítulos de un cuento con títulos que alternan entre castellano y francés. Diez escenas musicales con tintes improvisatorios, lúdicos y espontáneos, orquestadas con piano, clarinete, teclado, tarareos, naturaleza y ambiente, y ordenadas en un juego de alternancia entre dos espacios: exterior e interior, jardín y cocina, piano y clarinete, ella y él.
Kalmtillo es un álbum de postales sonoras de una temporada de escape en la vida de este dúo. Guarda la sonoridad de lo íntimo y lo genuino, particularidad que lo hace especialmente conmovedor. Algo de este color está dado porque fue grabado íntegramente de aire con una grabadora portátil. También podría decirse que las grabaciones son no tan convencionales ya que abunda la materialidad de los instrumentos y el ambiente tiene un rol especial al recrear la cotidianidad e integrarse con la música.
En este experimento de 24 minutos de improvisación, María y Aidons se vacían de convenciones aprendidas para rearmar su propio lenguaje. Las melodías están sugeridas entre pausas, susurros y respiros. Las pulsaciones fluctúan de manera indefinida regalando una temporalidad libre de cronómetros. Los instrumentos y las voces se integran a una música que ya está sonando en el paisaje que habitan. Y la intuición -representada con un pato de bronce en la tapa del disco- es suficiente para hacer música.
Kalmtillo puede escucharse en plataformas de streaming (Bandcamp, Spotify, Tidal, Apple Music).
Eric Olsen – Campo
Campo es el último disco del compositor Eric Olsen editado por el sello bonaerense Lassi International en agosto de 2023. Se trata de una obra inspirada en el folclore argentino y la calma del campo, ocho tracks que invitan a una escucha amplia y contemplativa en donde el tiempo se disipa, crece en aumentaciones y distancias entre acordes de sintetizador, arpegios de guitarra y grabaciones de campo.
Pareciera que este disco sale del cuento de titulado “El azul de la distancia”, en el que la escritora estadounidense Rebecca Solnit imagina grandes extensiones de terreno que son posibles de abarcar con la mirada. En este caso, Eric construye la imagen de la distancia con sonidos. Si el sustain fuera proporcional a la extensión del paisaje, Campo sería la música de un lugar muy lejano en el que el tiempo se percibe como un estado de espera aletargada y el espacio es insondable y difuso. Un paisaje cargado de esa neblina que no permite diferenciar el fin de la tierra y el principio del cielo.
Esta densidad espectral influye directamente en la percepción del tiempo, ya que las repeticiones de las pulsaciones son difusas y brindan al oyente una temporalidad laxa y aletargada. Esta sensación, enfatizada por los tiempos alargados, los cortes y las detenciones, favorece a desarmar la percepción del tiempo. Las notas se distancian con cada aparición hasta perder la referencia del pulso. La repetición se hace impredecible y brinda una certeza de saber que algo sucederá pero desconociendo el momento exacto.
Campo construye una imagen que se aleja con los sonidos electrónicos y se aproxima con las grabaciones de campo. Los sonidos acústicos devuelven los pies a la tierra, traen lo conocido, achican el espacio y devuelven el tiempo. La música se deshace del cronómetro y el paisaje es luz en casi 28 minutos de profundidad.
Campo puede escucharse en plataformas de streaming (Bandcamp, Spotify, Tidal, Apple Music).
Tomás Cabado – Pillow Shots
Pillow Shots es el último álbum editado por el guitarrista y compositor Tomás Cabado a través del sello bonaerense Isla Visión. Es un disco posterior a un importante número de obras de su autoría, un álbum muy diferente a sus trabajos anteriores y que él mismo menciona como “un pasaje entre sus discos”. Cabado lo compuso en la distancia de un viaje por Bélgica, una música para guitarra y sonidos indescifrables de un mundo que viene a armar el tiempo que la música desarma.
El título del álbum hace referencia a un tipo de plano audiovisual utilizado por el director de cine japonés Yasujiro Ozu. Estos “planos almohada” son los planos aparentemente aleatorios con imágenes de la vida cotidiana que se utilizan como transición entre escenas y otorgan una suspensión a la historia para convocar a adoptar una actitud contemplativa.
Pillow Shots es un disco que bordea la línea del ambient y lo experimental al presentar dos planos sonoros que se funden continuamente entre armonía y realidad. Tomás construye una narración de 33 minutos alternando entre planos de vida y planos de contemplación. La transición entre estos es sutil, imbrica principios y finales, y logra generar tal continuidad entre los tracks brindándole a la música una unidad y la forma de un relato sonoro.
Cada ambiente del afuera es reconocible en timbres y ritmos y regula a la música en una nueva temporalidad. Una máquina, un reloj, algunos pasos, un canturreo, un pájaro, chasquidos… allí, la música ya está sonando y parece que Tomás se uniera al paisaje sonoro con el sonido de su guitarra. La música nos pierde progresivamente, desarma el tiempo del afuera y detiene la percepción. El resultado es una deriva musical organizada en seis tracks de idiomas y expresiones particulares.
Pillow Shots puede escucharse en plataformas de streaming (Bandcamp, YouTube).