AC/DC tiene muchas marcas distintivas, pero una de las más patentes es la boina de su cantante Brian Johnson. Sea cual sea la ocasión, Johnson va estar vistiendo su boina característica, y hay una razón detrás de ello.
Durante una entrevista radial, contó que la historia se remonta a sus primeros años como músico y tocaba en bares de Inglaterra: el frío afuera era penetrante, pero la calefacción en los interiores era insoportable si estabas dando un show de rock.
A uno de esos conciertos asistió su hermano, quien acababa de comprar un auto y había recibido la correspondiente gorra típica de conductor de auto deportivo. Mientras Brian estaba tocando, el sudor provocado por el intenso calor empezó a meterse en sus ojos y a nublar la vista. Fue entonces que su hermano se acerca y le dice que tenía los ojos rojos. Al contestar que se debía al sudor, el hermano le puso la gorra para detenerlo.
Este recurso funcionó de maravilla y además fue una referencia a una costumbre muy popularizada entre los hombres del norte de Inglaterra que, luego de la guerra, mantenían el uso de la gorra casi como un uniforme. Es decir que no solo funcionó como protector para el sudor sino también como una manera de llegar a su público a través de la identificación. Con su uso prolongado, la boina se convirtió en una marca registrada de AC/DC.