Meses atrás, poco tiempo antes de que el clásico disco de Nirvana, Nevermind, cumpliera 30 años, el bebé de la tapa quiso hacerse oír y armó un verdadero revuelo. Hablamos de Spencer Elden, quien al día de hoy reclama dinero por parte de los miembros de la banda, la viuda de Kurt Cobain y los involucrados en la sesión fotográfica que lo llevaría a estar desnudo en una de las portadas más famosas del rock.
Si bien Elden se ha declarado un fanático del disco en varias ocasiones, actualmente alega que ha sufrido daño psicológico por haber sido expuesto en aquel álbum y llegó a hablar de que esta exposición implicaba pornografía infantil. Sus abogados llevaron a cabo la demanda pero ninguno de los acusados habló públicamente sobre ello. Ahora ha sido Dave Grohl quien decidió hacer referencia al tema.
Fue en una conferencia de prensa a propósito de su nuevo libro The Storyteller que el baterista de Nirvana fue consultado por su postura acerca de la demanda de quien fuera el bebé de la portada. “No sé si puedo hablar porque no he pasado demasiado tiempo pensando en eso. Siento lo mismo que la mayoría de la gente, estoy en desacuerdo”, respondió a Craig Jenkins de Vulture. Lo cierto es que la opinión pública, en general, se mostró en contra de la demanda de Elden, sobre todo porque previamente había declarado que era un honor ser parte de esta portada histórica.
Si bien Grohl intentó no darle mucha importancia al tema, el periodista volvió a preguntar por la postura de Elden y, para terminar el tema, el cantante de Foo Fighters fue lapidario: “Escúchame, él tiene un tatuaje de Nevermind, yo no”. Así, Grohl dejó clara su postura frente a las exigencia legales del joven.