Con el correr de los años, los Foo Fighters pasaron de ser un tímido proyecto iniciado por Dave Grohl luego de la muerte de Kurt Cobain a convertirse en una de las bandas más importantes y respetadas de la escena de rock actual.
En el transcurso de ese proceso, el grupo tuvo que recorrer el mismo camino que casi todos los artistas grandes: empezar de abajo tocando en lugares pequeños y abriendo shows para otros hasta convertirse en ese tipo de conjunto que cierra festivales y vende estadios enteros.
Desde que mutaron de teloneros a teloneados, Grohl y compañía han visto a una infinidad de colegas realizar la tarea de calentar el ambiente para su llegada, entre los cuales, por ejemplo, se encuentran Biffy Clyro, Wolf Alice, The Kills, Kaiser Chiefs, Death Cab For Cutie y Queens of the Stone Age.
Pero hay una banda que, según el ex baterista de Nirvana, se destaca entre todas aquellas que tuvieron que cumplir ese rol: The Struts.
“Supongo que no reciben mucho amor en Inglaterra, pero en Estados Unidos son el mejor acto de apertura que hemos tenido”, le confesó Grohl a Radio X sobre el grupo de la ciudad inglesa de Derby.
“Ese niño Luke [Spiller], el cantante, es increíble. Saldrá frente al público en Tulsa, Oklahoma, donde nadie ha oído hablar de ellos y para el final del show tendrá a toda la gente en la palma de su mano. Me encanta ver eso. Ver a una audiencia ponerse así no es fácil”, señaló el cantante y multiinstrumentista.
Sobre su actual jerarquía en el ambiente musical, el también director comentó:
“Una de las mejores cosas de estar en la posición en la que estamos de hacer estos grandes shows es decidir quién toca con nosotros. Tratamos de exponer a nuevos públicos a una nueva y gran música que tal vez de otra manera no podrían haber escuchado. Bandas como Wolf Alice y The Cribs son enormes, y no necesitan nuestra ayuda. Pero, a veces, elegimos a un grupo menos conocido y les pedimos que salgan a la carretera con nosotros”.